Los diferentes programas de mejoramiento genético han hecho muy bien su trabajo, permitiendo que hoy en día el arándano se pueda cultivar en diferentes latitudes, sin importar si la zona productora tiene las características adecuadas para su cultivo, porque hoy la acumulación de horas frío ya no es un problema. “Podemos producir de mar a cordillera, en desierto, en climas lluviosos”, refiere el asesor internacional Sebastián Ochoa. Pero, ¿la oferta de arándanos podría colapsar el mercado?

Para el especialista, en Perú la tasa de crecimiento ha sido gigante, pues en relación a la temporada pasada se estima que el volumen va a crecer un 30%. “Ya el año pasado hubo semanas donde la oferta sobrepaso a la demanda, se espera que este año finalmente vuelva a cruzar, o sea la oferta va a superar a la demanda y ahí eso es un colapso del mercado porque no hay suficiente demanda para la cantidad de oferta de fruta que está”, explica.

En ese contexto, la calidad de la fruta será decisiva la próxima y siguientes campañas, para que las producciones locales sigan siendo competitivas, para el consumidor compre y repita su compra.

“Como he hablado en conferencias, hay estudios de marketing que demuestran que cuando un norteamericano compra fruta de mala calidad repite la compra al mes siguiente, a diferencia de cuando compra fruta de buena calidad repite la compra una vez a la semana. Por lo tanto, la demanda se multiplica por cuatro”.

– ¿Y cuáles son los aspectos que la fruta peruana debería mejorar para obtener un mejor resultado competitivo?

– Partiendo de la genética, el gran desarrollo de las zonas tempranas a nivel mundial lo ha dado Biloxi, que es una variedad que da una fruta que organolépticamente no es muy agradable, es una fruta que tiene una epidermis gruesa, es ácida, y el mercado quiere una fruta obviamente ‘crunch’, que sea agradable de comer, que sea dulce. Entonces, primero tenemos el potencial genético que las variedades antiguas no me lo dan, ahora hay programas genéticos que nos permiten obtener una fruta con mejor sabor y de ahí obviamente hacer los manejos para lograr ese potencial genético que me da la variedad. Pero la base es la genética.

– Sabemos que hay problemas especialmente por el tema logístico, de transporte, de la llegada de arándanos por el largo tiempo, ¿cuáles son los problemas que está mostrando la fruta y que se podrían mejorar?

– Son problemas finalmente de senescencia, o sea, una fruta que está construida para vivir 40, 50 días está llegando al mercado recién a los 40, 50, inclusive 70 días desde que la fruta fue enviada. Entonces, llega con pudrición, llega colapsada. Llega con problemas de deficiencia de calcio, la fruta se saca del frio en las góndolas y tiene una vida muy corta, también por generación de ácido abscísico en la fruta. Entonces, si yo hago manejos adecuados en cuanto a regulación de carga, ya no dejar todo lo que me da la planta, sino que dejar brotes vigorosos, sacar los brotes en sombra, sacar fruta iluminada para que el calcio por corriente transpirativa llegue a estos órganos. También debemos hacer un buen manejo de polinización con las abejas. Las abejas sacan el néctar de la flor y por lo tanto disminuye la presión de Botrytis en la fruta. Después hacer una buena pulverización, con maquinarias bien calibradas, con las boquillas adecuadas, que envuelva bien la aplicación, que envuelva bien la planta, ingrese el producto dentro de la flor. Y después hacer adecuados manejos nutricionales, por supuesto que me va a permitir tener una fruta que va a ser mucho más competitiva frente a estos problemas adversos del mercado que son las demoras en los buques. Y además que como hay escasez de contenedores se están utilizando contenedores antiguos que han fallado, entonces la fruta tiene que ser más resistente. Y sumado a eso, obviamente hay un mercado de oferta, no de demanda, donde la gente va a comprar lo que tiene mejor calidad.

PANORAMA DE LAS ZONAS PRODUCTIVAS

– Tú hiciste un recorrido por las distintas zonas productivas de Perú, ¿qué observas en las tendencias para esta temporada?

– Yo partí recorriendo desde Piura hasta Ica. Bueno, Perú viene con un año marcadamente más frío, o sea, los últimos cinco años que es lo que hemos evaluado es el año más frío por La Niña. Tenemos problemas de evapotranspiraciones más bajas, la planta en este momento (a mediados de agosto) está con llenado de fruto y eso genera un estrés en la planta, hay un estrés oxidativo que es donde yo debo apoyar a la planta. Y partiendo por Piura, viene atrasado en relación a otras zonas, además que Piura está con un problema de alta presión de trips. Y hay ciertas variedades que son más susceptibles, entonces he visto huertos con pérdidas productivas completas en este momento, ya que el trips destruyó las yemas florales, no va a dar nada de fruta esta temporada. Se ve un problema importante en Piura por ese lado. Olmos es una zona que está bastante sana, pero ya entró el oídio, también me tocó ver campos con una alta presión de oídio, lo que obviamente también genera que la planta se estrese, se dañen las hojas y no pueda obtener un buen producto. Entonces, preocuparme del control de oídio en Olmos. Trujillo está frío y con temperaturas bajas, que ocasiona que las plantas estén con ápices un poco rojizos, ocasionado por el frío. Preocuparse también de estimular la planta, de hacer que la planta tenga un buen sistema radicular activo, en la parte aérea que no caiga el estrés oxidativo a través de aplicaciones de aminoácidos, de extractos de algas de buena calidad. El norte chico que viene bastante bien. Santa Rosa y Huacho, pero también es una zona que entro el oídio, que tiene algo de presión de trips, que también hay que preocuparse porque está atrasada en relación a años anteriores. Dentro de Perú si está un poquito más adelantada que Ica. Y ya después ya la zona sur que sería Cañete, la zona de Chincha que es una zona muy húmeda, mucha presión de Botrytis. Me tocó ver Botrytis activa en las plantas, una alta presión de trips en algunas variedades, entonces ahí también hay que preocuparse de la sanidad, estimular la planta. Bueno, Ica donde estamos ahora que es una zona con bastante luz, tiene un clima más seco, es la zona que yo diría en este momento me gustó más de Perú, de cómo está, ya está más adelantado, ya están partiendo las cosechas, se ve una buena calidad. Pero está más frío que en años normales, por lo tanto, tengo que preocuparme de soportar esta carga, que la planta pueda mantenerse bien durante estos 6 meses de cosecha que se vienen. Así que a utilizar productos de alta calidad y tecnologías que nos permitan sacar un producto de alta calidad.

– ¿Frente a este cuadro regional dónde va a ser más difícil competir? ¿Tú ves algunas zonas de Perú que tengan más ventajas competitivas y comparativas versus otras donde sea más difícil o desafiante?

-De todas maneras. Primero está el tema logístico. Debemos tener claro que si estamos en la sierra a cuatro horas de camino o incluso Olmos, que también está lejos, eso nos pegará en la disponibilidad de la mano de obra en sacar la fruta a tiempo. Entonces, si hay problemas de mano de obra, sacaremos fruta sobremadura y tendremos problemas de calidad, mas encima en un año complicado. Agroclimáticamente hablando, Olmos, Ica y Santa Rosa, son muy buenas. Yo diría que las zonas más complicadas por presiones de plagas y enfermedades, y por días nublados, y por llovizna es la zona de Cañete y Chincha.

– ¿Te gustaría dar un mensaje final a los productores de Perú y en general a los distintos productores de los países que visitas?

– Lo que me toca ver en todos los países, las experiencias de los productores en base a los resultados que tienen año a año es que este es finalmente un mercado maduro. Ya no es un negocio estrella como era antes, ya la fruta no se vende sola, hay que venderla, hay que hacer el trabajo de la venta y para eso se necesita calidad. Por lo tanto, estamos en un mercado en el cual tenemos que preocuparnos de tener un producto ‘premium’ y no exportar producto que vaya a tener problemas porque aparte del productor que exporta un producto de mala calidad va a tener un mal resultado, va a afectar al mercado porque eso disminuye el consumo. Entonces tenemos que ser todos muy responsables y todos remar hacia el mismo lado y todos empujar a que este negocio siga siendo un buen negocio como lo ha sido hasta el día de hoy.