Potencial varietal en Chile para enfrentar el escenario mundial del arándano
Investigadores de la Universidad de Chile trabajaron en determinar el potencial de vida de postcosecha de diferentes variedades, empleando como tecnologías base la refrigeración y el uso de bolsas perforadas durante dos periodos simulados de transporte y comercialización.
Miguel Valladares*, Tamara Quezada*, Danilo Arellano*, Julia Pinto**, Víctor Escalona*.
*Centro de Estudios Postcosecha (CEPOC), Facultad de Ciencias Agronómicas, Universidad de Chile. **Comité de Arándanos de Chile (ASOEX).
Contacto: vescalona@uchile.cl
Chile sigue posicionándose como uno de los principales exportadores de arándanos frescos del mundo, alcanzando un récord de exportaciones durante la temporada 2020/2021 y obteniendo un aumento de 8,2% respecto a la temporada 2019/2020. Lo anterior es gracias a un aumento de la superficie plantada, el recambio varietal y las nuevas tecnologías de pre y postcosecha implementadas.
De esta forma, los arándanos chilenos se posicionan en el mercado internacional debido a que presentan una buena calidad general. Sin embargo, debido a la alta competitividad y exigencia de los mismos es relevante generar una búsqueda constante de nuevas herramientas tecnológicas para poder satisfacer a los mercados. Dentro de los principales defectos observados en la fruta por el consumidor final destacan la deshidratación visual, la pérdida de firmeza e inicios de pudriciones en frutos. Junto a lo anterior, el consumidor está en constante búsqueda de arándanos firmes, sabrosos y cultivados bajo tecnologías amistosas con el medio ambiente. En este contexto, se buscan variedades que permitan superar cuatro semanas de almacenamiento y transporte refrigerado sin la aplicación de tratamientos adicionales, manteniendo la calidad visual y una apariencia turgente al momento de la compra.
Por esta razón, se realizó un estudio para evaluar la vida útil y la calidad general de once variedades utilizadas actualmente en la industria chilena para exportación, algunas de ellas consideradas nuevas y otras tradicionales, además en una variedad se consideraron dos zonas de producción. El propósito fue determinar el potencial de vida postcosecha de estas variedades empleando como tecnologías base la refrigeración y el uso de bolsas perforadas durante dos periodos simulados de transporte y comercialización.
En el estudio se evaluaron 11 variedades: Emerald, Suzi Blue, Ventura, Blue Ribbon, Legacy, Duke, Cargo, Drapper, Last Call, Top Shelf (zona centro-sur: ZC y zona sur: ZS) (Cuadro 1). Los arándanos cosechados fueron seleccionados en una línea de proceso y envasados en clamshells de 125 g. Posteriormente fueron embalados en bolsas perforadas de 0,9% de área ventilada y colocados en cajas de 1,5 kg. Durante la conservación no se dispusieron de generadores de SO2dentro de las bolsas.
Los arándanos fueron almacenados y evaluados en el Centro de Estudios Postcosecha (CEPOC) de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile. Se dispuso de 12 cajas de arándanos con 12 clamshell cada una. Se utilizaron 4 cajas para hacer la evaluación de la calidad inicial (S0) de los frutos (la evaluación se realizó el día siguiente de la llegada de los arándanos) (Foto 1). Las 8 cajas restantes fueron almacenadas por 28 (S1) y 35 (S2) días a 0°C más 2 días a 5°C, seguido de 2 días a 10°C (Figura 1). Durante el periodo de almacenamiento y los periodos a 5 y 10°C la fruta se mantuvo dentro de las bolsas.
Se realizó un diseño completamente aleatorizado, donde el factor evaluado correspondió a la variedad. Para el análisis de datos se realizó un análisis de varianza (ANDEVA) mediante el software estadístico InfoStat. Para encontrar diferencias entre los tratamientos aplicados, se realizó una prueba de comparaciones múltiples de LSD Fisher con un nivel de significancia del 5%.
Finalizando los periodos de almacenamiento, la pérdida de peso se calculó a través de la diferencia de peso inicial con el día de la evaluación, empleando una balanza electrónica (Ohaus, SC 6010). Los resultados se expresaron en porcentaje de pérdida de peso.
Por otro lado, la deshidratación se evaluó visualmente en los frutos por cada clamshell mediante la escala de deshidratación descrita en la Figura 2. Las evaluaciones se llevaron a cabo luego de cada periodo de evaluación. Los resultados se expresaron en porcentaje de frutos por envase.
Se realizó una medición de la firmeza con un durómetro (F0, Baxlo) sobre ambas mejillas del fruto con un cilindro de penetración de 2,38 mm, presionando suavemente el fruto contra el cilindro, se calculó el promedio entre ambos valores y se expresó en unidades shore (Ush). Adicionalmente, se realizó una medición de firmeza con un analizador de textura (TA.TX express) utilizando un plato que evaluó la resistencia del arándano a una compresión de 1 mm a 1 mm s-1.
La presencia de micelio se determinó pesando los frutos afectados y expresando el resultado como porcentaje de micelio en relación con el total de fruta analizada. De la misma forma se evaluó la cantidad de fruta con colapso.
Se determinó la relación SST/AT, donde los sólidos solubles totales (SST) y la acidez titulable (AT) se midieron sobre muestras de jugo con un refractómetro termocompensado y por titulación con NaOH, respectivamente.
RESULTADOS
Pérdida de peso. Al término de S1, la mayor pérdida de peso se observó en la variedad LC con un 2,92%, mientras que la menor pérdida se tuvo en la variedad TS (ZS) con un valor de 1,70% (Foto 2, Figura 3). Por otra parte, los resultados en la S2 demostraron un comportamiento similar de pérdida de peso, donde los valores promedio más altos observados fueron en las variedades DK (3,12%), V (3,12%) y LC (3,58%), mientras que los menores fueron en C, BR y L con 2,08; 2,15 y 2,16%, respectivamente (Figura 3).
Deshidratación visual. Asociado a la sintomatología que se observa en la zona de la inserción peduncular, se consideró los niveles 1 y 2 de la escala de deshidratación visual (Figura 2) como aceptables para comercialización. También, es importante destacar que este parámetro se relaciona directamente con los resultados obtenidos de la pérdida de peso, ya que corresponde a una expresión visual de dichos datos. En este sentido, según los resultados en la S1, las variedades con más presencia de frutos con deshidratación visual fueron LC, C y TS (ZS), ya que presentaron una reducción de 22,4 y 37,1 % de los frutos con puntuación 1 + 2 respecto a la evaluación inicial (S0). Por otro lado, las variedades que concentraron mayor cantidad de frutos en los niveles 1 y 2 fueron L (94,1%) y SB (99,1%) respecto a S0 (Foto 2, Cuadro 2).
Finalmente, en la S2 se observó que la variedad con mayor resistencia a la deshidratación visual fue L ya que presentó un 90,1 % de los frutos en 1 y 2 de la escala de deshidratación respecto a S0 (Cuadro 2).
Firmeza. Respecto a la firmeza según texturómetro, en la S1 la mayor firmeza fue observada en la variedad BR (1,4 N) mientras que la menor correspondió a las variedades DP, C, TS (ZS), EM, TS (ZC) y LC, con valores de 0,7; 0,9; 0,9; 0,9; 1,0 y 1,0 N, respectivamente. Por otro lado, en la S2 la mayor firmeza fue en las variedades L (1,8 N), BR (1,4N) y SB (1,3N) mientras que la menor correspondió a las variedades DP y TS (ZS) con valores de 0,6 y 0,6 N, respectivamente. En ambas evaluaciones la variedad tuvo un efecto significativo sobre la firmeza.
Asimismo, en las evaluaciones realizadas con el durómetro Baxlo, el análisis estadístico mostró diferencias significativas de firmeza entre variedades en ambos periodos de almacenamiento. En la S1 la mayor firmeza se obtuvo en las variedades V (77,5 Ush) y SB (81,7 Ush), mientras que la menor correspondió a TS (ZC), DP y TS (ZS) con valores promedio de 67,4; 69,0 y 70,3 Ush, respectivamente. Finalmente, en la S2, al igual que los resultados obtenidos con el texturómetro, las mayores firmezas se observaron en las variedades L (80,9 Ush), SB (77,1 Ush) y BR (76,7 Ush), y las menores en TS (ZC), TS (ZS), EM y DP con valores de 65,9; 66,2; 67,0 y 68,6 Ush, respectivamente.
Los resultados obtenidos con ambos instrumentos concuerdan con las evaluaciones de deshidratación visual ya que las variedades L, SB y BR presentaron las mayores firmezas observadas y, a su vez, los menores síntomas de deshidratación.
Presencia de micelio. En la S1 los menores porcentajes de micelio fueron observados en las variedades LC, L, BR, SB, TS (ZC), EM, TS (ZS) y C que presentaron valores entre 0 y 6,6%, mientras que, el mayor valor fue en DK con 21,6%. En la S2, las variedades se comportaron de forma similar a la S1 y el mayor porcentaje de frutos con pudrición lo obtuvo DK con 23,3% (Figura 4).
Fruta colapsada. Si bien el colapso no se correlaciona directamente al decaimiento fúngico, la sintomatología de este desorden fisiológico puede provocar la colonización de diferentes patógenos en las bayas. En este sentido, luego de las evaluaciones de la S1 los mayores porcentajes de fruta colapsada fueron observados en las variedades DK, TS (ZS), LC y C que presentaron valores entre 2,5 y 4,5%. Por otro lado, en la S2, la variedad que presentó el mayor porcentaje de colapso fue C con 9,58%.
Es importante mencionar que las variedades Blue Ribbon y Legacy en las evaluaciones de presencia de micelio y fruta colapsada no presentaron bayas con estos problemas.
Sólidos solubles totales (SST). En la S0, el mayor valor de SST lo tuvo la variedad V (14,3%), mientras que las demás variedades presentaron valores entre 9,9 y 12,8%. En la S1 el mayor valor se observó en las variedades DP, EM, C, LC, V, BR y DK oscilando entre 12,0 y 12,6%. Por otro lado, en la S2, las variedades presentaron un comportamiento similar donde el mayor valor promedio lo obtuvo LC con 12,5%, mientras que el menor fue en TS (ZS) con 10,1%.
Acidez titulable (AT). En la S0, el mayor valor observado fue en LC con 1,15% mientras que, los menores se obtuvieron en SB y DK con 0,27 y 0,25%, respectivamente. En la S1 los mayores valores fueron en V y LC con 0,93 y 0,90%, respectivamente, mientras que los menores se encontraron en EM, BR, TS (ZS), TS (ZC) y DK con valores entre 0,27 y 0,45%. Por último, en la S2, se observó que la variedad LC tuvo 1,02%, valor significativamente mayor respecto a las variedades TS (ZC), BR y DK con 0,27 y 0,42%.
Relación SST/AT. En el análisis inicial los mayores valores promedio observados se encontraron en las variedades SB y DK con 51,8 y 44,6 respectivamente. En la S1 el mayor valor fue en la variedad DK con 44,8, mientras que los menores fueron en L, DP, BR, LC y V que presentaron valores entre 13,1 y 19,5.
En la S2 el mayor valor promedio fue en la variedad DK con 43,9, mientras que las variedades DP, L, SB, V y LC presentaron los menores entre 12,2 y 17,8. Por otra parte, se pudo observar que la única variedad que tuvo una relación mayor a 30 fue DK (43,9). Las variedades en las que se observó una relación entre 20 y 30 fueron BR, TS (ZC), EM, TS (ZS) y C. Finalmente las variedades con una relación SST/AT menor a 20 fueron DP, L, SB, V y LC con valores entre 12,2 y 17,8. En general todas las variedades conservaron su condición inicial a excepción de la variedad EM, donde la relación aumento con respecto a la S0 (Figura 6).
CONSIDERACIONES FINALES
Las variedades estudiadas en este trabajo presentan gran variabilidad en su potencial de postcosecha. Sin bien no fueron tratadas con SO2 presentaron una muy baja carga fúngica general y destacando por la baja presencia de pudriciones Legacy y Blue Ribbon.
La firmeza fue otro parámetro que mostró diferencias claras entre las variedades siendo Blue Ribbon, Legacy y Suzi Blue las que mantuvieron una mayor firmeza al término de los periodos de simulación. Además, estas mismas presentaron sus frutos con baja o nula deshidratación visual. Respecto al colapso, se podría inferir que las variedades Cargo, Emerald, Legacy y Top Shelf de la zona sur serían más propensas a presentar colapso.
Finalmente se elaboró el siguiente cuadro resumen de comparación con una valoración descriptiva para cada variedad según los parámetros pérdida de peso, deshidratación, firmeza, presencia de micelio y colapso. La valoración se realizó a través de marcas que indican mayor o menor valoración en los frutos de arándanos tras 35 días a 0°C más 2 días a 5°C y 2 días a 10°C.
Para saber más
vescalona@uchile.cl
www.cepoc.cl
AGRADECIMIENTOS
Se agradece la colaboración y apoyo de las empresas socias del Comité de Arándanos de Chile (ASOEX) en la ejecución de este proyecto.