Por equipo Redagrícola

Una de las mayores procesadoras de cereza de Italia empezó la temporada de 2022 con la última tecnología clasificadora óptica para detectar imperfecciones en sus cerezas premium, en búsqueda por  mejorar sus producciones, minimizar los residuos, reducir los costes de mano de obra y satisfacer requisitos de calidad cada vez mayores.

Se trata de la empresa Giacovelli en Turi (región de Bari), con la procesadora óptica SFS (Small Fruit Sorter) con Invision2 y Total View Plus de TOMRA Food, instalada por su colaborador italiano, Icoel.

La máquina de la empresa que diseña y fabrica máquinas de clasificación basadas en sensores y soluciones integradas de postcosecha, está conectada a la plataforma digital Total View Plus, que es capaz de detectar una amplia gama de defectos de la fruta, tanto internos como externos.

La compañía, que hasta 2021 realizaba sus procesos de forma manual, adquirió esta tecnología de clasificadoras ópticas, para adaptarse mejor a la demanda cada vez mayor de los mercados.

“Gracias a la nueva máquina de clasificación, hemos mejorado todo lo relativo a selección de diámetro y calidad del producto final: ahora podemos lograr un calibrado mucho más preciso. La máquina aprende todos los días de nosotros cuáles son las complicaciones e incluso las ventajas de cada variedad de cereza, y detecta defectos para lograr el producto final de mayor calidad”, explica Anna Giacovelli, representante de la empresa.

La Invision2 de TOMRA Food clasifica según tamaño, forma y color, las toneladas de cerezas que se procesan cada día en la planta que Giacovelli tiene en Turi. Además, el módulo Total View Plus, gracias a sus 7 visualizaciones distintas de la cereza, detecta de forma precisa una amplia gama de defectos sin que la velocidad del proceso o la productividad por hora se vean afectadas por ello.

De hecho, a pesar de la velocidad de producción, la fruta no sufre golpes ni daños y las transferencias se realizan en agua para asegurar la individualización y la distribución correcta de la fruta a cualquiera de las 30 salidas de la planta.

Carlos Eyheralde, agrónomo chileno y jefe de control de calidad de la empresa, señala que tras un mes de uso de la Invision2 de TOMRA Food en la planta de envasado de Giacovelli, comenta: “Esta máquina se acerca muchísimo más a lograr un producto final limpio y homogéneo. Valoro especialmente la calidad de su electrónica, sus sensores y la precisión de las cámaras ópticas encargadas de detectar problemas tanto los problemas físicos como los problemas internos de la fruta. Todo se gestiona de forma mecánica y electrónica, incluso cuando las cerezas entran en la línea, y todo el proceso es extremadamente suave”.