El burrito de la vid

No hay que arrojar una bomba para acabar con una larva. La clave está en identificar primero los problemas, y recién ahí aplicar el o los productos indicados para las condiciones del huerto y superficie. Esa es la principal recomendación de Nancy Vitta, investigadora de INIA La Platina. La experta advierte que, independiente de la plaga que esté presionando el huerto, aplicar productos es un camino directo a generar resistencia en los insectos.  “Esto es algo que viene de años, precisamente por malas aplicaciones”, sostiene. “Hay plagas en Chile ya han presentado resistencia por esto”.

Uno de los casos donde se puede apreciar esto en terreno fue en el proyecto de gestión sostenible de Brevipalpus chilensis en uva de mesa, que realizaron en la Región de Atacama, donde se enfocaron en determinar la eficacia de acaricidas autorizados por el SAG para el control de la también llamada falsa arañita de la vid.

El proyecto, ejecutado entre 2020 y 2021, se realizó porque es una de las zonas más afectadas del país por este ácaro (principalmente por condiciones climáticas de temperatura y baja humedad), en una zona que tiene entre 8.000 y 9.000 hectáreas (ha) de viñedos, la mayoría destinado a la producción de uva de mesa, con aproximadamente 7.700 ha.

Nancy Vitta, de INIA La Platina

La característica que tiene este ácaro nativo de Chile es que hiberna dentro de la parra, específicamente en el tronco, como hembra grávida -o que se vendrá a aparear-, por lo tanto, cuando inicia su desarrollo en la siguiente temporada de primavera, cuando comienza la brotación, empieza de nuevo el ácaro a colocar sus huevos e iniciar su ciclo.

Uno de los objetivos de este proyecto era poder mitigar el problema de Brevipalpus analizando la posibilidad de que los productores pudieran disminuir la cantidad de plaguicidas, lo que incluyó, entre otras estrategias, encuestas para ver cómo la gente podía disminuir el uso de químicos, para evitar seguir generando resistencia, además de muestreos y trabajo de laboratorio para evaluar los químicos.

“Lo que se buscaba era determinar la eficacia que tenían tanto en campo como en laboratorio, y con esos datos de análisis de eficacia se pudo determinar cuáles son los mejores productos para poder ser aplicados”, precisa Vitta.

Sin embargo, la experta señala que lamentablemente -independiente de la plaga-, detectaron muchos problemas con la aplicación de productos, debido a que muchos los aplican sin utilizar las técnicas para una aplicación correcta. “Muchos solo ven el calendario y no ven ni monitorean lo que hay en el momento, sino que de acuerdo a lo que el calendario dice, aplican”, detalla sobre lo que considera un error.

Para la investigadora, las condiciones adecuadas para realizar las aplicaciones, son siempre bajo 25°C, nunca sobre esa temperatura, por lo que…