Bananeras de Urabá requieren riego para aumentar su productividad
En las condiciones de Urabá, la productividad del banano podría aumentar de 2 mil a 3 mil cajas por hectárea/temporada mejorando aspecto tales como compactación de suelos e incorporando sistemas de riego.
Durante nuestro recorrido por la finca El Roble, que hace parte de Agrícola Sara Palma S.A (filial de la Comercializadora Internacional Unibán), Gabriel Arias, Jefe de Servicios Técnicos de la Unidad de Producción Agropecuaria de Unibán, y Edgar Rivas, administrador del predio, expusieron los principales retos a los que se enfrenta el agronegocio bananero de Urabá y cómo es el trabajo que realizan para producir una fruta con calidad de exportación.
Agrícola Sara Palma S.A es la filial de Unibán que administra 27 predios que en total suman 3.634 hectáreas, de las cuales el 96% están dedicadas a la producción de banano y fueron sembradas con clones Valery y Williams.
Todas sus fincas están certificadas en GlobalG.A.P y Rainforest Alliance, sistemas de gestión que velan por la inocuidad de los alimentos, el cuidado al medio ambiente y la seguridad y salud de sus trabajadores.
La finca El Roble cuenta con 300 hectáreas en bruto, de las cuales 290 se encuentran produciendo banano. Un 85% de la fruta va a Europa y el 15% restante viaja a Estados Unidos, ya que el mercado estadounidense se está abasteciendo, en mayor parte, de la fruta que proviene de Guatemala.
EL IMPACTO POSITIVO DEL RIEGO
Como en la mayoría de los predios bananeros de Urabá, la falta de agua entre diciembre y marzo-abril es una limitante para aumentar la productividad de la fruta en la finca El Roble. “El banano es una fruta que es entre 75% y 80% agua. Si bien el riego aumentaría un poco los costos de producción, lo compensaríamos con una mejor productividad de los cultivos, generando más ganancias al sector”, explica Gabriel Arias, Jefe de Servicios Técnicos de la Unidad de Producción Agropecuaria de Unibán.
Así mismo, la relación que existe entre el racimo cosechado y el número de cajas de 18,14 kilogramos, a la que se le conoce como ratio, puede bajar considerablemente por la ausencia de agua.
Otro de los aspectos que afecta la productividad de los cultivos en Urabá es la compactación de los suelos, que conlleva al deterioro de la raíces. “Para contrarrestar esta situación aquí en la finca descompactamos los suelos con un Hércules, que es como un gran tenedor que ara la tierra (subsolado), cada seis meses”, señala Edgar Rivas, administrador de la finca El Roble.
CALIBRACIÓN DE LA FRUTA
CAJAS PARA EXPORTAR BANANO
Dentro de las múltiples tareas que realiza Unibán como productora y comercializadora de banano, con sus fincas y empacadoras, está la elaboración de cajas para la exportación de la fruta. Por tal razón, esta compañía cuenta con una fábrica que funciona desde 1978, produciendo cajas de cartón corrugado para la industria hortofrutícola, con una capacidad de respuesta rápida, además de contar con la posibilidad de impresión sobre el cartón.
En el 2016 la planta se renovó con equipos modernos, que tienen una capacidad para 96.000 toneladas de papel para la elaboración de cajas de cartón con óptima calidad y resistencia, haciendo uso de materias primas de alta calidad y papeles importados de los más importantes molinos en el mundo.
Esta fábrica hace parte fundamental de la integración vertical de Unibán, con la producción de cajas de cartón que completan el sistema de empaque para la comercialización nacional e internacional producto como el banano, el plátano y la piña.
En los 62 lotes que tiene la finca El Roble, sus trabajadores realizan tareas como la calibración del banano, con el fin de que la fruta cumpla con los parámetros, grosor y largo, exigidos por los diferentes mercados. Es importante resaltar que la unidad de medida para el grosor de la fruta en Colombia es un treintaidosavo de pulgada (1/32”).
Para Estados Unidos se exige una fruta cuyo calibre oscile entre 8 y 18, en el grosor, y 8 pulgadas en el largo, debido a la cercanía entre Colombia y el país norteamericano, al que los viajes por vía marítima demoran entre 4 y 5 días. En el caso europeo las condiciones cambian, ya que es un destino que está a 17 días en barco y se debe garantizar que la fruta no llegue madura al puerto. Por tal razón, Europa pide un banano que tenga un grosor entre 7 y 16, con un largo de 8 pulgadas.
Finalmente, es importante destacar que en la finca El Roble, como en todos los cultivos de banano tipo exportación, el personal marca los racimos con cintas de diferentes colores, con el fin de saber la edad de cosecha de los mismos. El corte de los racimos se realiza entre las semanas 10 y 12, dependiendo del calibre del banano. Si la fruta no es cortada en este lapso de tiempo entra en un periodo de maduración temprana y empieza a tener cambios fisiológicos, lo que hace que no sea apta para exportación.