Esta nueva técnica de secado del arándano que permite la conservación de los arándanos por un mayor periodo de tiempo, manteniendo sus propiedades nutricionales, fue desarrollada por un equipo investigador de docentes y estudiantes de la Universidad Privada del Norte (UPN), quienes realizaron el proyecto en el Centro de Investigación Avanzado en Agroingeniería (CIAA) de la UPN en Trujillo.

La técnica empleada fue el secado por ventana refractante que utiliza energía térmica para eliminar el agua del producto, reduciendo en 30% el tiempo del proceso respecto al método tradicional. “Los arándanos se consumen principalmente en forma fresca, sin embargo, son altamente perecederos, lo que limita su comercialización, almacenaje y disponibilidad fuera de temporada. Buscamos desarrollar procedimientos para optimizar su conservación”, señala Meliza Rojas, docente investigadora UPN e integrante del proyecto.

Por tanto, destacó que las empresas productoras de productos deshidratados se beneficiarán en términos de energía y costos. “Gracias a la optimización del tiempo de los procesos, también se ahorraría costos de producción y los precios serían más bajos para el sector agrícola”, explica la investigadora.

Rojas explica que el estudio representa una alternativa de solución en el marco de la crisis alimentaria. “Los alimentos secos brindan seguridad en épocas de escasez porque pueden ser almacenados por tiempos prolongados y transportados con facilidad a zonas donde los productos frescos no se producen”, indica.

Cabe mencionar que esto ocurrió gracias a la implementación del primer Centro de Investigación Avanzada en Agroingeniería, desarrollado por la UPN en Trujillo, proyecto que beneficia a jóvenes investigadores y al sector agroindustrial. “El CIAA busca contribuir al desarrollo de la región mediante propuestas innovadoras de mejora de productos y procesos de la agroindustria”, finaliza Rojas.

El proyecto estuvo  formado por  el equipo de  estudiantes de ingeniería agroindustrial Eduardo Rurush, María Alvarado, Paola Palacios y Yeimy Flores, junto al docente investigador de UPN, Alberto Miano. Los resultados de la investigación fueron publicadas en la revista Journal of Food Engineering (Q1), fuente internacional reconocida por compartir  estudios relacionadas con la ciencia de los alimentos.