Miguel Patiño

Luego de una temporada récord en 2021, los productores de cereza en California, Estados Unidos, ya comienzan a evaluar los daños a sólo semanas de que comience la cosecha de 2022

La campaña pasada el estado norteamericano produjo 10,1 millones de cajas (de 8,2 kg), la más alta registrada, pero para esta temporada, con cosechas programada desde la última semana de abril, se avecina por lo menos desafiante, principalmente por heladas registradas a finales de febrero.

De acuerdo a un reporte de Fruitnet, lo que se esperaba como una campaña prometedora por un diciembre muy húmedo, suficientes horas de frío y una racha de clima cálido en febrero, cambió de golpe luego de que se registraran varias noches de temperaturas bajo cero que azotaron la mitad norte del estado durante el segundo mes del año.

A esto se suma que la enorme cosecha de 2021 probablemente podría haber estresado a los árboles -ya debilitados por condiciones de sequía-, por lo que ya se anticipaba una cosecha más corta en 2022, como suele ser el caso después de un año de gran volumen.

De acuerdo a algunos productores consultados por el medio, estos daños podrían significar que la cosecha se reducirá entre un 15 y un 20 por ciento con respecto a la última temporada. De hecho señalan que incluso los daños dejaron a algunos huertos sin fruta.

Los daños de estas heladas, según señalaron productores al medio, habrían afectado a las principales variedades de la zona, donde destacan Coral y Bing. Cabe destacar que Coral fue la variedad líder en volumen en California la temporada pasada con 3,6 millones de cajas, seguida de Bing con 2,8 millones.