Un nuevo proyecto de investigación en UC Riverside (California, Estados Unidos), respaldado por una subvención de  US$1.2 millones de la Fundación W.M. Keck, se centrará en desentrañar cómo se comunican las abejas melíferas y qué factores influyen en su comportamiento defensivo.

“Si entendemos lo que estresa a las abejas sobrevivientes, eso puede informar diferentes estrategias de apicultura”, afirmó la entomóloga Barbara Baer-Imhoof en una publicación de la casa de estudios.

La académica liderará esta investigación son las abejas, que son esenciales para la polinización de un tercio de los alimentos que consumimos, pero que desde 2006 han enfrentado una alarmante disminución en su población.

Este estudio se enfocará en las abejas ‘sobrevivientes’ de California, que han demostrado ser más resistentes a plagas y enfermedades. Según Baer, “estas abejas presentan una notable tolerancia a los ácaros mortales y condiciones extremas como el calor y la sequía”, lo que las convierte en un foco de interés para los investigadores.

El equipo de investigación estudiará cómo estas abejas perciben y procesan amenazas ambientales, así como la forma en que comunican esta información a otros miembros de la colmena y a futuras generaciones.

“Este enfoque innovador podría llevar a un cambio de paradigma en la investigación sobre las sociedades de abejas”, comentó Baer, quien considera que estas abejas pueden ser vistas como entidades con logros culturales.

Además de mejorar la salud de las abejas, la investigación tiene como objetivo desarrollar nuevas estrategias de apicultura que protejan a estos vitales polinizadores. “Con el creciente desafío del cambio climático y la disminución de su población, comprender el comportamiento y la comunicación de las abejas es más crucial que nunca”, enfatizó Baer.

La salud de las abejas es fundamental para la producción de alimentos y el equilibrio de los ecosistemas, lo que hace que estos esfuerzos sean esenciales para garantizar un futuro sostenible.