Los hongos que generan patologías tipo cancro en los paltos, enfermedad conocida también como ‘hongo de la madera’, cobraron relevancia en los últimos años por afectación la vida útil de los árboles en huerto, lo que ha llevado a los productores a dirigir esfuerzos de control contra estas enfermedades en fincas de paltos en Perú, Colombia, Chile, México y California.

En una industria como la mexicana, donde hay unas 200.000 hectáreas (ha) plantadas, que producen sobre 1,8 millones de toneladas al año, el Dr. Salvador Ochoa, investigador de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, explica que los hongos fitopatógenos  y, recientemente, Neopestalotiopsis, causan cancros en tronco y ramas de palto, que pueden ocasionar la muerte regresiva de los árboles.

“Son patologías que inciden de manera muy importante en la vida útil del árbol y reducen, por supuesto, los niveles de producción”, explica el experto y precisa que en los años ochenta del siglo pasado, las enfermedades del palto se reducían a la pudrición de la raíz por Phytophthora, antracnosis y la roña del fruto. En la actualidad el número de enfermedades ha incrementado, destacando las pudriciones de raíz por Armillaria y Cylindrocarpon y los cancros de Phytophthora en el tronco.

“Diferentes patógenos buscan la manera de abrirse camino en otros cultivos y los invaden. Un caso particular es el palto”, acota el Dr. Ochoa.

La identificación de los síntomas para un diagnóstico correcto, la identificación molecular de los patógenos y la aplicación de fungicidas específicos son clave para el manejo eficiente de los cancros de tronco y ramas del palto y reducir el riesgo de la propagación del patógeno en el campo.

ENFERMEDADES DEL PALTO Y FACTORES DE PREDISPOSICIÓN

Actualmente, las enfermedades que se han reportado en el palto no se veían hace algunos años. Hoy los especialistas se enfocan en el combate de enfermedades de la raíz del palto, principalmente patologías inducidas por Phytophthora y, eventualmente, patologías vasculares inducidas por Verticillium. Estas enfermedades generan marchitez y muerte regresiva de los árboles.

Sin embargo, en los últimos años se han asociado dos factores, a la mayor presencia de cancros en palto, que causan marchitez de ramas y muerte regresiva, constituyendo un problema sanitario en los huer-
tos: los efectos de la temperatura y la práctica de podas.

“En México hemos tenido tres años de estrés calórico: se retrasaron las lluvias y, se incrementaron las tempera-
turas en los meses más cálidos de México, que son de marzo a mayo. Esto generó estrés en la planta que favore-
ció la expresión de hongos asociados a cancro de madera que, por lo general, son endófitos, están en los árboles, y que emergen por las condiciones de estrés de la planta”.

El segundo factor de la presencia de hongos de madera está relacionado al manejo agronómico del cultivo a través de las podas inadecuadas que generan heridas en troncos y ramas, y que permiten el ingreso al árbol de patógenos causantes de cancros y muerte regresiva.

CANCROS EN RAMAS

Cuando la producción de palta en México comenzaba hace cuatro décadas, y previo a la apertura del mercado norteamericano en 1997, el cultivo del palto Hass presentaba enfermedades a nivel del tronco por un riego inadecuado y la infección del porta injertos. “Desde entonces, las huertas presentaban ese tipo de síntomas, ge-
neralmente a nivel de tronco, y de ahí no pasaban. Y estas se concentraban principalmente, en el porta injerto”.

En el caso del hongo de la madera, la patología de cancro inicia a través de una herida, principalmente en los
entrenudos, con un punto necrótico asociado a una lesión en la parte de la corteza. “Puede ser pequeña, incluso causada por insectos que, de alguna manera, también son colaboradores de heridas para que los hongos penetren.

Y también por heridas por prácticas agronómicas como la poda. En todos los casos, el patógeno avanzará desde el perímetro de la rama hacia el centro”, detalla el especialista mexicano.

Sobre las podas en plantaciones de alta densidad refiere que los productores deciden eliminar las copas de los
árboles lo que constituye una ‘invitación’ para que los patógenos que tienen una función endófita, migren
a las heridas y generen muerte de madera.

La infección genera cambios que afectan la epidermis de la rama. Eventualmente alcanzará el cambium vascular y el xylema, e incluso puede afectar la parte interna del tejido. Los cancros son reconocidos con facilidad por la aparición de exudaciones blancas, sustancia conocida como perseitol. Este es un signo que advierte de la presencia de un problema de cancro en el palto.

“El palto contiene en sus ramas un azúcar llamado perseitol, que es liberado a través de las heridas que generan los cancros. En contacto con el aire, el perseitol adquiere una forma grumosa, primero blanca y después de color
marrón”, apunta el Dr. Ochoa y describe que, si se retira la corteza de la rama, es posible observar el avance del patógeno y el cambio en la coloración de los tejidos vasculares. Este daño interfiere con la translocación de agua, lo que se refleja tanto en marchitez como en muerte regresiva de ramas.

“Se notará la paulatina, pero progresiva desintegración no sólo de células acompañantes de los haces vasculares, sino la propia destrucción de los haces vasculares. Incluso el crecimiento de hifas del hongo en el interior de los haces vasculares. Cuando esto ocurre, hay una obstrucción del flujo de agua que generará la muerte regresiva por marchitez”.

El Dr. Ochoa precisa que los gusanos barrenadores de ramas inducen también flujos de perseitol, produciendo secreciones blancas que podrían llevar a una confusión en el diagnóstico, por lo que es necesaria una precisa revisión del daño para establecer la causa.

El síntoma característico de la muerte regresiva de las ramas por cancro es el amarillamiento, defoliación y muerte de las ramas más altas o laterales a donde resulta más difícil el transporte de agua desde la raíz.

Además, las condiciones de suelo no favorables como la resequedad producen estrés en la planta, factor aprovechado por el hongo para expresar la marchitez y muerte regresiva.

CANCROS EN MATERIAL DE PROPAGACIÓN

Los hongos son capaces de presentarse en materiales de propagación, sobre todo, en las heridas producidas en la zona de injerto. Las infecciones pueden expresar el síntoma o mantenerse de alguna manera latentes, no observarse a simple vista, sino hasta que se evidencian los efectos en el huerto, advierte el Dr. Ochoa.

“El patógeno involucrado destruye el cilindro central y eso se ve reflejado en una etapa temprana de plantación en el campo. Si llevamos materiales con ese tipo de síntomas iniciales, seguramente al paso de algunos meses de haber sido instalada la planta, se va a presentar una muerte regresiva en la planta joven”, explica.

Sobre las plantas clonales, precisa que los productores de las mismas no siempre cumplen con los requisitos ni calidades sanitarias que demanda la producción de este tipo de plantas, por lo que se observan también en estos materiales el desarrollo de estas patologías.

HONGOS CAUSANTES DE CANCROS EN PALTO

Los hongos causantes de cancros en paltos pertenecen al grupo de los Ascomycota, un grupo donde se encuentran dos clases de gran importancia para los cultivos, Dothideomycetes y Sordariomycetes.

En el primer grupo se encuentran los órdenes Dothidiales, Pleosporales y Botryosphaeriales, que incluyen miembros causantes de cancros en varias especies de árboles, incluyendo palto. Dentro del orden de los Botryosphaeriales se encuentran Botryosphaeria y Lasiodiplodia que se reconocen como causantes de diversas enfermedades en árboles, arbustos y plantas ornamentales.

“Varios miembros de Botryosphaeriales están asociados a diversos cancros del palto, afectando la madera de tronco y ramas, lo que provoca con el paso del tiempo muerte regresiva del árbol”. 

En Sordariomycetes, en el grupo Hypocreales, se encuentran especies de Geosmithia que causa una enfermedad conocida como ‘la enfermedad de los mil cancros’ en diversas especies leñosas, y especies de Nectria, también asociadas a cancros observados en palto.

“Es difícil determinar especies en Botryosphaeriales. Se requiere de la ayuda de varios marcadores moleculares y de la reconstrucción filogenética para lograr establecer la identidad de especies”, sostiene el experto.

Las especies de Lasiodiplodia que más se destacan por su abundancia y riqueza global principalmente en regiones tropicales son L. theobromae, L. pseudotheobromae y L. crassispora. Estas regiones tropicales coinciden precisamente con varias zonas en donde se cultiva el palto.

“En México poca importancia se daba a las enfermedades de madera en palto. Nos preocupaban otras enfermedades, no tanto los cancros. Y ahora que este tema llega a ser muy frecuente en las diferentes zonas de producción, se pone mayor atención a su estudio para entender su patogénesis y los factores de predisposición que favorecen su presencia en los huertos comercia-
les de palto”.

La patogenicidad de Lasiodiplodia en palto fue verificada y validad por el Dr. Ochoa a través de inoculaciones artificiales en ramas de palto, con el fin de determinar la capacidad de los hongos aislados para causar infecciones. “Encontramos que diez días después de la inoculación artificial de ramas jóvenes, a partir del punto de inoculación, se extendió una gran área de tejido necrótico lo que confirma la capacidad patogénica de esta especie en palto”.

En el caso de Botryosphaeria, en México se estudian también otras especies que generan daños en ramas gruesas y brotes jóvenes en palto.

“Además de Lasiodiplodia, enconlos requisitos ni calidades sanitarias que demanda la producción de este tipo de plantas, por lo que se observan también en estos materiales el desarrollo de estas patologías.

HONGOS CAUSANTES DE CANCROS EN PALTO

Los hongos causantes de cancros en paltos pertenecen al grupo de los Ascomycota, un grupo donde se encuentran dos clases de gran importancia para los cultivos, Dothideomycetes y Sordariomycetes.

En el primer grupo se encuentran los órdenes Dothidiales, Pleosporales y Botryosphaeriales, que incluyen miembros causantes de cancros en varias especies de árboles, incluyendo palto.

Dentro del orden de los Botryosphaeriales se encuentran Botryosphaeria y Lasiodiplodia que se reconocen como causantes de diversas enfermedades en árboles, arbustos y plantas ornamentales.

“Varios miembros de Botryosphaeriales están asociados a diversos cancros del palto, afectando la madera de tronco y ramas, lo que provoca con el paso del tiempo muerte regresiva del árbol”.

En Sordariomycetes, en el grupo Hypocreales, se encuentran especies de Geosmithia que causa una enfermedad conocida como ‘la enfermedad de los mil cancros’ en diversas especies leñosas, y especies de Nectria, también asociadas a cancros observados en palto.

“Es difícil determinar especies en Botryosphaeriales. Se requiere de la ayuda de varios marcadores moleculares y de la reconstrucción filogenética para lograr establecer la identidad de especies”, sostiene el experto.

Las especies de Lasiodiplodia que más se desta- can por su abundancia y riqueza global principalmente en regiones tropicales son L. theobromae, L. pseudotheobromae y L. crassispora. Estas regiones tropicales coinciden precisamente con varias zonas en donde se cultiva el palto.

“En México poca importancia se daba a las enfermedades de madera en palto. Nos preocupa-
ban otras enfermedades, no tanto los cancros. Y ahora que este tema llega a ser muy frecuente en las diferentes zonas de producción, se pone mayor atención a su estudio para entender su patogénesis y los factores de predisposición que favorecen su presencia en los huertos comercia- les de palto”.

La patogenicidad de Lasiodiplodia en palto fue verificada y validad por el Dr. Ochoa a través de inoculaciones artificiales en ramas de palto, con el fin de determinar la capacidad de los hongos aislados para causar infecciones.

“Encontramos que diez días después de la inoculación artificial de ramas jóvenes, a partir del punto de inocutramos una diversidad de especies de Botryosphaeria asociadas a palto Hass, en donde también las pruebas de patogenicidad que se han corrido indican que se tratan de especies fitopatógenas y que merecen nuestra atención con estudios futuros para determinar de qué manera están influenciando la salud de la planta”.

Sobre los hongos de madera de importancia en Perú, se encuentra Lasiodiplodia theobromae como especie dominante, y otras como Lasiodiplodia laeliocattleyae, con menor presencia, pero también identificados como especies patógenas asociadas a la marchitez de ramas.

A lo anterior se suma otro grupo de hongos de reciente detección, asociados a cancros de madera en palto:
Neopestalotiopsis, que son objeto de estudio del profesor para establecer su grado de asociación con las patologías
observadas en el palto.

“Desde hace un par de años estamos realizando estudios sobre todo en plantas jóvenes establecidas en regiones que se alejan de las zonas ideales de cultivo; ahí se está encontrando con mayor frecuencia este patógeno”, comenta el experto.

EVALUACIÓN DE FUNGICIDAS

Para el manejo de L. theobromae, Salvador Ochoa evaluó in vitro cinco fungicidas (Tiabendazol, Tiofanato metilico, Tebuconazol, Propiconazol y Hymexazol) en concentraciones desde uno hasta mil ppm para determinar la eficiencia de los fungicidas en la inhibición del crecimiento del hongo.

La sensibilidad de L. theobromae a los cinco fungicidas reveló diferencia de respuestas del patógeno dominante en los cancros de palto en México. Al calcular la Concentración Efectiva Media (EC50 mg/l), la curva obtenida indicó que Tiabendazol, Tiofanato metilico, Tebuconazol y Propiconazol ofrecen una respuesta rápida a concentraciones bajas.

En tanto que Hymexazol es menos efectivo para inhibir el crecimiento del hongo y su EC50 es relativamente alta.

“Sin embargo, estos ensayos inicialmente están orientados para el desarrollo de estrategias de manejo que puedan ser implementadas en la producción de planta en vivero, así como en campo para sanitizar y proteger heridas de corte de podas. En una segunda etapa los fungicidas deberán evaluarse bajo condiciones de campo para determinar su efectividad en la protección y recuperación de árboles afectados por hongos de madera”.

RECOMENDACIONES DE MANEJO DEL CANCRO

Para el manejo de hongos de la madera o cancros de tronco y ramas, el Dr. Ochoa recomienda la poda de ramas afectadas ya que en estas se forman las estructuras reproductivas del hongo, que le permiten sobrevivir y dar inicio a nuevas infecciones. Además, se debe retirar y destruir la madera muerta de árboles con daños severos. En ciertos casos, la cirugía vegetal es una alternativa efectiva.

“Cuando encontramos ramas con cancros, es de gran importancia podar las ramas afectadas y llevar a cabo prácticas de sanitización para evitar justamente la esporulación de los patógenos y la eventual dispersión del mismo”, detalla.

“Las podas deberán hacerse preferentemente en épocas de secas. Para evitar el estrés de las plantas, debe llevarse un manejo nutricional adecuado y realizar el control oportuno de otros problemas sanitarios. En el caso de los viveros, se deben observar estrictas medidas de sanitización; realizar la desinfección del material de propagación y tratar la unión del injerto con fungicida”, añade.

Las estrategias de manejo de los hongos de madera deberán estar orientadas a proteger las heridas de poda; se debe evaluar la eficiencia de los fungicidas en campo para prevenir infecciones y también se debe estudiar la epidemiología de los diferentes hongos causantes de cancros para establecer estrategias efectivas de prevención y control así como desarrollar protocolos de producción de plantas libres de infecciones.