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Entrevista a Marcela Esterio

Esta temporada de cerezos será de tizones por hongos y bacterias

Ante las complejidades climáticas que enfrenta la temporada, la académica de la Universidad de Chile señala que bajo estas condiciones se necesitan bombas con productos eficaces que puedan controlar con un amplio espectro de acción los tres ‘invitados de piedra’ de esta campaña: Botrytis, Monilia y Alternaria y también incluir productos que tengan efecto antibacteriano para el control de Pseudomonas syringae pv. syringae.

22 de Septiembre 2023 Miguel Patiño
Esta temporada de cerezos será de tizones por hongos y bacterias

A la izquierda, flores de variedad Lapins afectadas por Botrytis spp. A la derecha, flores de la misma variedad, con inicio de tizón en pétalos causados por Pseudomonas syringae pv. syringae.

El comienzo de la floración de los cerezos en este inicio de la temporada 2023/24 ha sido muy distinto al de temporadas recientes, con presencia de alta humedad relativa dada por lloviznas, precipitaciones intermitentes y temperaturas fluctuantes durante varios días, favorecedoras de infecciones por hongos y también por bacterias, tal vez como pocas veces se ha registrado.

En una temporada marcada por la incertidumbre climática, se ha observado en varios huertos tizón en flores, síntomas que pueden ser consecuencia de infecciones asociadas a hongos tales como Botrytis spp. y Monilia spp., agentes causales de la pudrición gris y de la pudrición morena o parda en cerezo, como también por bacterias del género Pseudomonas (Ps. syringae pv. syringae / pv. morsprunorum).

Sobre esta inusual presión de enfermedades fúngicas, la académica del Departamento de Sanidad Vegetal de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, Marcela Esterio, sostiene que Botrytis podría ser uno de los hongos más ‘beneficiados’ en el panorama climático de la actual campaña, pero no es el único, porque las condiciones climáticas han sido también muy favorecedoras para el desarrollo de Monilia y para el desarrollo de la fase de tizón de flor de la enfermedad denominada cáncer bacterial causada por Pseudomonas spp. La acción de los hongos, en ese sentido, generará daño en flores y mayor riesgo de infecciones en pre y postcosecha si no se realizan programas de control de alta eficiencia, explica la experta. “El ataque de bacterias, además de dañar las flores puede, a partir de ese daño, involucrar a las ramillas, y por lo tanto, a la larga provocar un daño más significativo en las plantas”, sostiene.

¿Cómo diferenciar el daño del causado por hongos del de bacterias? Es la pregunta del millón señala, indicando que es difícil de separar pero, por ejemplo, en general el daño por botrytis puede comprometer todas las partes florales, desde pétalos, estilo, estigma y las anteras. “La gran mayoría de las flores muy afectadas, posteriormente se caen y no llegan a fruto, puede también afectar el follaje y bajo condiciones extremas provocar daño en ramillas nuevas; en el caso de Monilia, también todas las partes florales pueden ser afectadas, y en este caso desde las flores se pueden comprometer las ramillas y provocar la muerte de éstas”, explica Esterio.

Marcela Esterio Grez, fitopatóloga y Prof. asociada Universidad de Chile.

La académica detalla que en esos casos todos los tejidos florales afectados no se caen y quedan adheridos a las ramillas, por lo que pueden producirse exudados de goma transparente que muy pronto se endurecen, y con el tiempo la infección se profundiza en la ramilla generando un cancro.

En el caso de la fase de tizón de flor causado por pseudomonas (cáncer bacterial), se pueden comprometer también todas las partes florales y la infección -en casos extremos-, desde los ramilletes florales puede llegar a las ramillas, profundizándose las lesiones que se hacen sistémicas, avanzado por los tejidos subcorticales. Sobre estas lesiones puede producirse goma, que es más bien de color ámbar y que no se endurece rápidamente, indica Esterio.

-¿Cómo se reacciona a este fenómeno?

-Difícil, no se puede pensar en reaccionar, todo tiene que ser preventivo evitando la ocurrencia de infecciones fungosas y bacterianas. Por ejemplo, la primera semana de septiembre visitando algunos huertos de cerezo en la región de O´Higgins, que se encontraban en inicio de flor (var. Lapins), ya se observaba tizón en algunas flores, y al día siguiente post lluvias, volví a revisar que había pasado y se presentaba mucho mayor presencia de flores atizonadas. Colecté muestras con daño y se sometieron a análisis fungosos y bacterianos, y entre los hongos mayoritariamente predominó Botrytis spp., el 100% de las flores que presentaban algún nivel de tizón presentaron desarrollo de este hongo (Figura 1) y en el caso de los aislamientos bacterianos, en todos se obtuvo desarrollo de colonias bacterianas de Pseudomonas syringae pv. Syringae (Figura 2).

Figura 1
Figura 2

¿Qué podemos hacer? Diría que la mayoría de los cereceros son muy aplicados y ya habían aplicado algo. En esta temporada el programa debe considerar productos que tengan efecto sobre Botrytis, Monilia y también sobre Alternaria (tebuconazole, fenbuconazole, difenoconazole, entre otros). Ahora bien, por el nivel de infección por botrytis detectado, lo ideal bajo las condiciones climáticas imperantes en este periodo sería aplicar algún producto de mayor efecto, como formulaciones en mezcla de productos con estrobilurinas (azoxistrobin & difenoconazole; Trifloxistrobin & tebuconazole), también podrían ser interesantes algunas carboxamidas con registro en cerezas (pentiopirad; fluopyram -en mezcla con tebuconazole-) o la mezcla fenhexamid & fludioxonil, entre otros.

En el caso del control de bacterias, es importante señalar que hace por lo menos unos diez años que no habíamos tenido floraciones tan complicadas. Generalmente no se aplicaba en flor con este propósito y no se consideraba dentro del manejo normal el uso de antibióticos, porque todos sabemos que tenemos que considerar manejos más sustentables y, como los antibióticos pueden generar resistencia, entonces la condición de un manejo integrado más sustentable es sin antibióticos. Pero, bajo las condiciones climáticas predominantes en la floración de esta temporada, los antibióticos se presentan como las herramientas más efectivas de control de bacteriosis, ya que presentan sistemicidad y tienen un efecto de protección mayor, ejemplo de este tipo de productos son Sulfato de Gentamicina & Clorhidrato de Oxitetraciclina; y Clorhidrato de Kasugamicina hidratado. Ambos productos se deberían aplicar en flor, una a dos aplicaciones desfasadas por 7 a 10 días según condiciones.

-Después de 10 años de sequía, el Fenómeno del Niño nos ha hecho volver a la normalidad de antes, ¿Qué efectos se verán en los huertos?

-Aparentemente, en esta temporada el efecto del Fenómeno del Niño puede generar condiciones climáticas adversas para el cerezo, como para otros cultivos, favoreciendo el desarrollo de problemas de índole fitopatológica como los que hemos mencionado, existiendo una alta probabilidad de que se repitan estas condiciones en octubre y también en noviembre cuando estemos en tiempo de cosecha. Ojalá esto no ocurra, porque generaría un gran daño. Es cierto, necesitábamos el agua y que lloviera harto pero en invierno, cuando los cultivos frutales están en receso, no en etapa de floración y menos en crecimiento activo de los frutos. Es un año complicado. Otro aspecto que debemos tener en cuenta es que el manejo de Botrytis en cerezo no debe comenzar en flor; lo ideal, según muestran algunos estudios, es partir aplicando al inicio de yema hinchada, ya que aparentemente existiría una alta correlación de los niveles de infección presentes en esta época con los resultados de infecciones detectadas en postcosecha. Esto solo algunos productores lo hacen, pero lo hacen más pensando en el control preventivo de hongos que afectan la madera de los frutales que en Botrytis.

-¿El que más se expresa es Botrytis?

-Depende, podría ser, pero ha habido temporadas que ni siquiera hemos tenido Botrytis. Nosotros hemos medido -por ejemplo-, en temporadas como la de 2021 en donde el periodo de floración fue de menor humedad, y donde el nivel de infección por Botrytis fue muy bajo, y lo que más se detectó fue Alternaria. Pero ahora, dadas las condiciones climáticas, es posible que se den infecciones de ambos y también de Monilia.

-¿Se puede pensar en alternativas biológicas y no sólo químicas?

– En general lo que se sugiere y lo que los mercados recibidores exigen son programas de control integrados que incluyan productos no residuales tales como extractos de plantas y/o antagonistas biológicos, sin embargo, bajo las condiciones climáticas de esta temporada los programas de control no pueden basarse solo en este tipo de productos y debe considerarse en las épocas más críticas como floración y de fruto pintón a cosecha fungicidas de mayor eficacia que presenten registro en los principales mercados de destino.

HONGOS DE MADERA

-¿Habrá problemas también con la madera del cerezo?

-En relación con los hongos de madera, los periodos críticos de infección son diferentes y no están precisamente asociados a la floración, sino más bien con época de poda y yema hinchada y con momentos de podas de verano. En general, su manejo debe ser como en todos los casos preventivos, mediante sellado de cortes de poda con pastas fungicidas, aplicación de fungicidas que tengan acción sobre hongos causantes de Cáncrosis del Cerezo como Cytospora sp. y Calosphaeria pulchella.

-¿Hay que repensar la forma en que se plantean los programas fitosanitarios viendo cómo se ha comportado esta temporada?

-Es que siempre tienen que repensarse los programas. Los programas no pueden ser fijos y no son para una zona determinada, sino que se realizan de acuerdo con las condiciones climáticas imperantes en cada temporada. En este minuto no estamos en condiciones de ir buscar el cuaderno de campo para ver qué es lo que aplicamos el año pasado y repetir lo mismo. No debiera ser. Ahora bien, por las condiciones altamente favorecedoras de enfermedades debemos considerar en el programa los productos de mayor eficacia y también procurar eliminar fuentes de inóculo potenciales como son los restos florales senescentes contaminados. Esta temporada lo fundamental serán las tres aplicaciones básicas de floración (inicio de flor, plena flor y caída de chaqueta), la aplicación de viraje de color (fruto color pajizo), la aplicación en precosecha y la aplicación que se realiza en la misma planta procesadora de la fruta.

-Pensando en aquellos huertos con cubierta, ¿el microclima que se genera también puede ser un acelerador de enfermedades ante estas condiciones climáticas?

– En el caso de coberturas bien diseñadas, considerando una altura adecuada sobre las plantas, esta protección va a evitar excesos de humedad por lluvias y por eventuales heladas y por lo tanto en general es un efecto positivo para el cultivo. El problema se da cuando el diseño de la cobertura no es el adecuado y está muy pegada a los árboles, o cuando se generan problemas de ventilación y con ello mantención de humedad por más tiempo. Esto pasaba al inicio, pero actualmente en el caso del cerezo, las coberturas son la solución para la protección de la fruta sobre todo en tiempos cercanos a cosecha y generalmente están muy bien diseñadas.

CHECK FAST BOTRYTIS 
La académica de la Universidad de Chile confirmó que este año será la primera temporada comercial del sistema Check Fast Botrytis, que permite detectar en 48 horas el nivel de infección de Botrytis y el nivel de sensibilidad a fungicidas base para el control de este importante fitopatógeno en uva de mesa. Esta innovadora tecnología para la industria de la uva de mesa se logró desarrollar con el apoyo de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), Fedefruta F.G. y de importantes empresas nacionales agroquímicas y exportadoras de frutas. En base a esta experiencia, actualmente el Laboratorio de Fitopatología Frutal y Molecular de la Universidad de Chile, en una nueva postulación a fondos concursables, pretende desarrollar e implementar la técnica Check Fast Cerezo que permitiría detectar en 48 horas simultáneamente el nivel de infección de Botrytis y Alternaria directamente desde tejido vegetal (flores y frutos) de cerezo.

Marcela Esterio señala que esta tecnología “hubiese servido mucho en esta temporada, porque a las 48 horas de colectar las muestras de flores habríamos sabido qué nivel de infección de Botrytis y de Alternaria teníamos y, en base a ese resultado, podríamos definir el programa de manejo más conveniente, o sea ¿qué deberíamos aplicar? si un fungicida de alta eficiencia más efectivo para uno u otro hongo, o para los dos patógenos. O bien decidirnos por un programa más sustentable frente a una baja frecuencia de infección en los periodos más críticos”.

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