Encuentro academia-empresa destacó a la postcosecha como herramienta clave para la seguridad alimentaria
El evento permitió conocer los avances e innovaciones en Chile y otros países por parte de sus propios investigadores, académicos y especialistas del sector privado, destacando los avances en sistemas de embalaje y el desarrollo de envases activos para el control de pudriciones. Al finalizar el evento, se anunció que las IX Jornadas serán organizadas por la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Las VIII Jornadas Anuales de Postcosecha, evento que se celebra cada dos años y que este 2024 organizaron en conjunto la Universidad de Chile e INIA, cerraron con éxito gracias a la asistencia de más de 300 personas, la presentación de 54 trabajos de investigación y 16 auspicios de empresas con presencia nacional e internacional.
El evento, que se extendió por dos días en la Facultad de Ciencias agronómicas de la Universidad de Chile, permitió destacar las tecnologías postcosecha como herramientas claves para asegurar el abastecimiento de frutas a nivel mundial.
Consultado por Redagrícola, el director regional de INIA La Platina y uno de los coordinadores de las Jornadas Anuales de Postcosecha 2024, Dr. Bruno Defilippi, quien además es investigador de INIA La Platina y especialista en postcosecha, señaló que el balance de las jornadas es “absolutamente positivo”, gracias al contenido de las distintas temáticas presentadas en las sesiones técnicas, como en el ambiente de camaradería que se vivió en ambos días de Jornada.
“Hubo un tremendo aporte desde la academia con la participación de profesionales de las distintas casas de estudio e institutos, así como de los especialistas asesores y empresas proveedoras de tecnologías. También mencionar, la importante cantidad de estudiantes , tanto participando con sus presentaciones como los que pudieron asistir”, señaló Defilippi.
Respecto a los contenidos y avances presentados durante el evento, el reconocido investigador detalló que “el hilo conductor, y que nos motivó desde un inicio como comité organizador, fue resaltar la importante vinculación academia-industria que ha sido la base para el desarrollo de la industria exportadora ya por más de 4 décadas. Esta interacción en conjunto al Estado dan la base u sustentabilidad de la industria frente a los cambios en el escenario técnico-comercial de la industria exportadora”.
El investigador del INIA añadió que “esta vinculación de la academia y la industria se evidenció desde la organización del evento, hasta los aportes en conocimiento y tecnología que se dieron a conocer en las distintas temáticas. Sin dudas, hay mucho más por venir, y podremos avanzar en la organización de las siguientes jornadas a cargo de la Pontificia Universidad Católica de Chile”.
Defilippi destacó además que un gran número de las charlas fue orientada a los avances en sistemas de embalaje, y entre ellas el desarrollo de envases activos para el control de pudriciones llamó la atención.
“Creo que es una de las líneas de investigación donde debemos avanzar como país complementando otras líneas que apuntan a una agricultura sostenible. Otra área de interés correspondió a los desafíos actuales que tenemos para producir fruta de calidad, y evitando pérdidas, frente a eventos climáticos cada vez más recurrentes. Estos eventos al modificar el funcionamiento del árbol estarán modificando aspectos asociados a calidad y vida útil de la fruta”.
COLABORACIÓN PÚBLICO PRIVADA
Las Jornadas fueron inauguradas por el subdirector nacional de I+D de INIA Chile, Dr. Christian Alfaro, quien destacó el prestigio de Chile en el área frutícola a nivel internacional, gracias al impulso constante de la industria y al aporte de expertos de diferentes instituciones de educación e investigación.
Recalcó que INIA Chile y la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile son un ejemplo de esto, a través de sus Centros Regionales y Estaciones Experimentales a lo largo del país dedicados a mejorar los procesos productivos y de exportación, aportando al desarrollo agroalimentario nacional e internacional. En la misma línea, la directora de Vinculación con el Medio de la Facultad de Ciencias Agronómicas, Verónica Díaz, valoró la formación de profesionales y el aporte a la comunidad.
En tanto, Juan Pablo Zoffoli, profesor de Fisiología y Tecnología en Postcosecha de la Pontificia Universidad Católica y encargado de abrir las Jornadas con una charla magistral, resaltó que esta es una instancia que se intenta realizar anualmente, donde se reúne a la academia, dando a conocer los últimos avances provenientes de los grupos de investigación y en especial durante esta ocasión, se incluyó a la industria siendo esta unión un tremendo logro e impacto, porque da sentido a una investigación que comunica sus resultados.
A modo general los expositores destacaron el alto nivel en el área de postcosecha en Chile, debido básicamente a las necesidades por exportar a mercados alejados en todo el mundo.
“Es un área que si no la desarrollamos nosotrosm ¿quién?”, se preguntó el Dr. Zofolli, señalando que dentro del hemisferio Sur la otra potencia en enfoque de exportación es Nueva Zelanda, quienes están focalizados en kiwis, manzanas y algo de arándanos, entonces “el desarrollo debemos hacerlo nosotros y eso parte desde la investigación. Es difícil proyectar nuevas tecnologías sin una investigación aplicada de base”, señaló.
Respecto a la situación actual, el especialista explicó que estamos en un área muy específica y estratégica, además si se considera el caso de los carozos (duraznos, nectarines y ciruelas), donde somos los únicos exportadores, no tenemos competidores en contra estación, entonces los resultados dependen de nuestro trabajo para controlar el mercado.
El otro ejemplo, agregó, es la uva de mesa. “Hemos sido líderes y hoy compartimos ese liderazgo con Perú, por lo que la investigación que hagan estos dos países es muy relevante para dar solución a los problemas de contrastación que enfrentamos durante el transporte a los mercados”, sentenció.
AUNAR ESFUERZOS INVESTIGATIVOS
Algunos de los asistentes se refirieron a este evento y las exposiciones que mostraron los avances y liderazgo de Chile en poscosecha. Una de ellas fue Julia Pinto, ingeniera agrónoma y gerente técnico del Comité de Arándanos de Frutos de Chile, quien señaló que “este tipo de jornadas son fundamentales para que se encuentre la academia y los centros de investigación de distintos puntos de Chile y el extranjero, así, podemos aunar esfuerzos en una línea investigativa sabiendo lo que está haciendo el otro, entonces es ponerse al día en el ámbito de la postcosecha, en tecnología, innovación, investigación y negocio”.
Lo otro importante, subrayó, es el dato duro que se saca en estas instancias de la investigación. “Hay datos concretos con una metodología, eso es fundamental para que la industria pueda tomar decisiones en base a la información concreta. También la alianza que nosotros tenemos con los distintos centros de investigación, especialmente con la Universidad de Chile y el INIA con los que hemos trabajado fuertemente aunando esfuerzos”.
“Muchas veces la empresa necesita respuestas rápidas, entonces les es difícil a veces comprender que tenemos que apoyar investigaciones primarias para generar un segundo paso, es decir, tenemos que entender primero un proceso para después aplicar esa investigación en algo práctico o en un producto”, dijo.
Mientras que Roberto Jara Maureira, ingeniero agrónomo – MSc Lab. Manager de AgroFresh, agregó que “estamos uniendo la academia junto con la industria mucho de lo que nosotros hacemos nace en la academia, por lo tanto, esta instancia nos da la posibilidad de conectarnos y generar cambios y desarrollos tecnológicos importantes para el rubro que representamos. Estas instancias nos permiten como empresa conectar con distintos actores, aquí tenemos la posibilidad de conocer los trabajos de investigación que se están realizando a nivel académico y desarrollarlos posteriormente en un producto comercial. Además, como empresa esta instancia es un medio para conectar con nuevos clientes y poder compartirles lo que estamos haciendo en temas de investigación y desarrollo tecnológico”.
Finalmente, Danilo Arellano González, ex alumno de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, jefe del área técnica de Liventus, empresa especializada en atmósfera controlada y uno de los expositores del evento, señaló “esta instancia me parece vital, porque siento que ha habido falta de sincronización entre la industria y la academia, se hablan lenguajes distintos, entonces creo que justamente estas instancias sirven para poder acoplar y alinear estos dos pilares fundamentales para el desarrollo de la postcosecha en Chile.