El sector agrícola no es el mismo. Independientemente del país, muchas transformaciones se han sucedido en los últimos 40 años y la agricultura que se realiza hoy poco y nada tiene que ver con aquella que se realizaba hace cuatro décadas. En el último tiempo, han aparecido nuevas ‘megatendencias’ que han llegado para quedarse. Optimización del suelo, eficiencia en el uso del agua y también de los fertilizantes son algunas de ellas y que una empresa como Innovak Global, con un gen de innovación bastante marcado desde su fundación, ha ido desarrollando herramientas y tecnologías para abordar estas tendencias, que se han instalado en el día a día de los agricultores de México y otros países.

Una empresa que desde sus inicios ha estado preocupada por desarrollar tecnologías para responder a las necesidades de los agricultores, Innovak Global ha formulado bioestimulantes que resuelven problemas críticos en los cultivos. Así mismo, ha enfocado su objetivo en la raíz y el desarrollo de sus tecnologías se ha dirigido a esa parte de las plantas. Siempre de la mano con los productores, la empresa, pone a disposición de ellos, productos y tecnologías para una producción hortofrutícola de calidad, cuidando la salud de la tierra y del medio ambiente.

POTENCIA Y PRESERVA LA FERTILIDAD BIOLÓGICA DE SUELOS AGOTADOS

Uno de estos desarrollos es Biofit® RTU, un bioestimulante microbiano. Lanzado al mercado en 2013, su nombre significa ‘Biología a la Medida’, mientras que las siglas RTU es ‘Ready to Use’.

Más que un producto, se trata de una tecnología, cuya base principal es Exu-Root, una tecnología patentada por la compañía que funciona como un inductor de exudados radiculares, “ayudando a que los microorganismos exógenos, es decir, aquellos que van en Biofit® RTU puedan colonizar la rizosfera de una forma eficiente y así enriquecer la microbiota rizosférica”, precisa la Dra. Ana Luisa Olivas, asesora de proyectos agrobiológicos de Innovak Global.

El otro constituyente de Biofit® RTU es un consorcio microbiano, todos ellos clasificados como organismos promotores del crecimiento vegetal. “Tenemos microorganismos que pueden fijar nitrógeno atmosférico, que solubilizan fosfato, que ayudan a la degradación de materia orgánica, que hacen disponibles otros tipos de nutrientes que están en el suelo. Y algunos nos pueden ayudar a que el cultivo sea más resiliente a los impactos climáticos”, explica la doctora.

“Estos microorganismos hacen que los nutrientes estén mejor disponibles para las plantas. También nos pueden ayudar en temas de sanidad, mejorar la estructura del suelo”, sostiene sobre una tecnología que permite mitigar algunos efectos de las plantas cuando estén sometidas a diferentes tipos de estrés que ocurren producto del cambio climático. “Eso es lo que hace, que las plantas sean más resilientes a estos tipos de cambios”, subraya.

EFICAZ EN TODO TIPO DE CULTIVOS

Biofit® RTU es una de las herramientas más generalizadas y robustas de Innovak Global. Hay experiencias en hortalizas como tomates, cebollas y chile; también en frutales templados de importancia económica como nogal pecanero, manzano y otros frutales tropicales como aguacates y banano.

“Lo que sí varía es la forma de aplicación y las dosis. En Innovak tenemos una disciplina de acompañamiento con el cliente y los agricultores poco a poco van introduciendo una herramienta tan innovadora como Biofit® RTU en sus programas”.

Las dosis varían y también la frecuencia de aplicación. “Además, en algunas ocasiones, podemos personalizar la presentación de Biofit® RTU. Nosotros evolucionamos de formulaciones líquidas a formulaciones polvos humectables. Sin embargo, también existe la versión granulada, de nombre Biofit® G, para que el agricultor tenga una forma más sencilla para aplicar el producto en manejos que lo requieran”.

Las tecnologías que ha diseñado y desarrollado Innovak Global, van acompañadas de un asesoramiento, ya que la recomendación de las aplicaciones de la mayoría de las formulaciones microbianas de la empresa es siguiendo los flujos radiculares del cultivo. Es decir, cuando la actividad de las raíces es más intensiva. 

Por ejemplo, en tomate se pueden tener hasta seis aplicaciones de Biofit® RTU a una dosis base de 2 kg/ha, con intervalos de aplicación cada dos semanas. En el caso del aguacate se tienen caracterizados dos flujos radiculares principales “cuando hablamos de árboles de gran porte podríamos ampliar el intervalo de aplicaciones, empezando en el primer flujo radicular, una segunda aplicación un mes y medio después de la primera y en el segundo flujo radicular la tercera aplicación”, precisa Ana Luisa Olivas.  

Sin embargo, en el aguacate hay ranchos que no tienen sistemas de riego tecnificado y, aquí la alternativa es Biofit G que está diseñado para mezclarse con fertilizantes granulados, una versión que es exclusiva para la industria agrícola mexicana.

Por ejemplo, en berries, específicamente en arándanos, en maceta, bajo riego por goteo. Entonces, la aplicación se puede hacer directamente en el sistema de riego con una dosis base de 2 kg/ha por aplicación.

BENEFICIOS DE LA TECNOLOGÍA

La planta, al final de cuentas, es quien dirá si esta tecnología está funcionando o no. “En un buen manejo, tenemos plantas mejor nutridas, sobre todo cuando se hacen análisis nutricionales en follaje, se tiene una mejor nutrición”, afirma la especialista de Innovak Global.

Y, como todos los microorganismos de Biofit® RTU son promotores del crecimiento vegetal, se tendrá un mejor desarrollo, que se ve expresado en un mejor rendimiento y en la calidad de los frutos. “A lo largo del tiempo, si se aplica por varios ciclos seguidos, en algunos cultivos hemos visto que, paulatinamente se pueden reducir las tasas de fertilización”, precisa.

“Recordemos que el posicionamiento de Biofit® RTU es un bioestimulante para la actividad rizosférica”, finaliza Ana Luisa Olivas.