Los efectos del cambio climático se han dejado sentir en las zonas de producción del país, ocasionando un continuo estrés en los cultivos, siendo los más afectados los cultivos frutícolas, como la uva de mesa. Ante ello, debemos hacer uso de un adecuado programa de bioestimulación que se inicie desde la parte radicular. Y es que tradicionalmente se ha dicho que la calidad de las cosechas viene desde abajo, haciendo referencia a la importancia de tener un buen volumen radicular que permita una adecuada nutrición hídrica y nutricional.

Complementando la bioestimulación del cultivo se hace necesario la aplicación de aminoácidos. Estos ayudan a una correcta nutrición, evitando el envejecimiento prematuro de las plantas, ayudando a mitigar los efectos del estrés provocado por heladas, excesos de frío, calor por temporadas largas o choque térmicos; que hacen que las plantas pueden tener dificultades para producir aminoácidos con calidad y en la cantidad adecuada. Para ello el uso de Aminocat en los cultivos constituye una herramienta importante en la bioestimulación del cultivo.

Un complemento importante es el uso de extractos de algas y en este caso el uso de Fitomare, un bioestimulante formulado a base de concentrado de algas (Ascophyllum nodosum), acompañado de una formulación complementaria para mejorar el metabolismo vegetal en situaciones de distintos tipos de estrés: sequía, salinidad, temperaturas extremas, etc. Además de su polivalencia frente a estrés, gracias a su formulación potenciada por NPK, boro, molibdeno y aminoácidos; lo convierten en un bioestimulante específico de interés en etapas de fuerte división celular del cultivo, como las fases de floración y cuajado temprano de frutos, mejorando tanto la calidad de las flores como el cuajado y desarrollo de los estos. Por ello, Atlantica Agricola dispone de una combinación im- portante en la bioestimulación de los cultivos:

Contacto:
Víctor Romano Saravia
vromano@atlanticaagricola.com
www.atlanticaagricola.com