Aumentan los rechazos de cítricos por presencia de plagas en la UE
Durante los primeros nueve meses del año pasado se habían rechazado un total de 164 envíos, mientras que en septiembre de este año se habían alcanzado los 204 envíos rechazados. El país con más mercancía retirada fue Argentina, con 139 envíos, un 562% más que en 2019 (21). Uruguay y Brasil contabilizaban catorce y cuatro envíos respectivamente, lo que para La Unió de Llauradors refleja “el grave peligro que supone la firma del acuerdo comercial de la UE con Mercosur, pendiente de ratificación, para la citricultura europea por el problema de las plagas”.
Los rechazos de mercancía procedente de Sudáfrica han descendido de 34 a 18, todos ellos por la presencia de la polilla Thaumatotibia leucotreta, una amenaza para la citricultura europea, como Phyllosctita citricarpa, hongo causante de la mancha negra de los cítricos, o Xanthomonas, bacteria que origina el cancro de los cítricos, también detectados este año. La Unió reclama a la Comisión Europea que efectúe rigurosas auditorías fitosanitarias en todos aquellos países que no puedan garantizar la salida de cítricos sin plagas y suspender las importaciones si no se dan las garantías adecuadas de riesgo mínimo.
La organización agraria también pide la implantación de un criterio de inspección única en origen para todos los países terceros y que las importaciones entren por pocos puertos de la UE –tres, como máximo-, donde se garantice la presencia de un número suficiente de inspectores expertos en plagas y enfermedades citrícolas y con un porcentaje de muestras analizado representativo. Además, propone la obligación del tratamiento de frío en el transporte y la prohibición en la producción y manipulación de cítricos del uso de materias activas que no estén autorizadas en la Unión Europea.
Por su parte, los laboratorios de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica de la Comunidad Valenciana han detectado más de una decena de plaguicidas en cítricos importados de Sudáfrica cuyo uso no está permitido en la producción agraria de la Unión Europea, aunque sí en los productos de terceros países, dentro de los límites máximos establecidos. En tanto, la consellera Mireia Molla ha señalado la necesidad de imponer fórmulas de reciprocidad comercial que igualen las exigencias fitosanitarias sobre los productores, una reivindicación que trasladó al ministro de Agricultura, Luis Planas, durante su reciente visita a la Comunidad Valenciana.