Las plagas que atacan los árboles de cítricos y paltos en Chile son un problema complejo para los productores y exportadores, no tan solo por los daños que puedan producir en el huerto, sino también por la alta posibilidad que pueda tratarse de casos cuarentenarios en países de destino, lo que implica muchas veces perder esos envíos si se detectan curculiónidos, como el burrito o capachito (Naupactus xanthographus o Naupactus cervinus).

Tanto para paltos como para cítricos, las plagas más relevantes de los últimos años han sido los chanchitos (Planococcus citri, Pseudococcus calceolariae, Pseudococcus longispinus) son las principales especies, en menor frecuencia se encuentra también Pseudococcus viburni, conocido como chanchito de la vid, las escamas blancas (Aspidiotus nerii como Hemiberlesia rapax, ambas cuarentenarias). Son un problema porque se fijan al fruto y en el packing deben ser raspadas con escobilla, lo que implica mayores gastos ya que al ser cuarentenaria, si es detectada, el envío debe ser desechado. En el huerto, las escamas blancas atacan ramas, brotes y hojas. Su presencia comienza en primavera, y si no se controla temprano, esa población comienza a aumentar hacia el verano. Otra plaga que también impacta en los huertos de paltos y cítricos es la conchuela negra del olivo (Saissetia oleae), que ha logrado predominar entre las plagas que más se están viendo en huertos, y destaca porque genera mielecilla, que es expelida hacia el entorno donde se fija.

“Junto con cuidar la salud del huerto, tenemos que cumplir también con el requerimiento de los países que reciben nuestra fruta, y en el caso de los cítricos básicamente más del 80% de la fruta que produce Chile está destinada a Estados Unidos, así que, en ese sentido es importante tener controladas las plagas que puedan ser de complejidad importante, como los curculiónidos y pseudococcidos (burritos y chanchitos)”, señala Alberto Armijo, Market Developer Crop Protection para la Región Metropolitana. El experto describe sobre estas plagas, específicamente en cítricos, que los capachitos y chanchitos están dando problemas porque, al pasar las inspecciones del SAG, estos insectos o sus huevos (que son más difíciles de encontrar), suelen ser difíciles de detectar ya que se ubican bajo las rosetas o en el ombligo de los cítricos, como en el caso de las naranjas.

Es por eso que desde Corteva se han desarrollado productos para combatir estas plagas que dificultan tanto el trabajo en el huerto como el proceso de exportación. Alejandro Toro, Crop Protection Agronomist de Corteva Chile señala que para combatir estas plagas complejas hoy cuentan con una serie de herramientas. Tal como se desarrolló  Success^® (Espinosad, Qalcova active)  para el control de trips, hoy cuentan con Closer^® para el control de escamas blancas, conchuela negra del olivo y para los chanchitos; y Capirel^®, una nueva tecnología biológica  para controlar larvas de curculiónidos y otras plagas previo a que emergen desde el suelo e infesten el follaje.

CLOSER^®: ALTA EFICACIA EN CONTROL DE PLAGAS

Si bien es un producto relativamente nuevo, Closer^® (Sulfoxaflor, Isoclast active 21,8%), se ha posicionado rápidamente como una de las herramientas eficaces para el control de plagas, destacando además por sus características de última generación al tratarse de un producto de etiqueta verde, y además muy amigable con los enemigos naturales de las plagas, elemento clave para la agricultura que busca equilibrios entre el uso de químicos y control natural de los huertos.

“Es importante que los enemigos naturales estén presentes, porque en general ejercen una labor  relevante en los frutales, señala Armijo sobre no alterar  los equilibrios de la fauna benéfica del huerto.

Closer^® es un insecticida de acción sistémica, de ingestión y contacto, destacando además por su movimiento translaminar en aplicaciones foliares, lo que provee un excelente control de insectos chupadores en árboles frutales y vides por ambos lados de la hoja. Este producto en base a Sulfoxaflor se encuentra registrado tanto en Chile como en Perú, Colombia y México,  países referentes en la producción de palta y cítricos.

Respecto a estas características, Alejandro Toro de Corteva detalla que “Closer^® es de un grupo químico distinto a cualquier otro insecticida que exista, tiene un mecanismo de acción diferente a piretroides, neonicotinoides u organofosforados, y ofrece alta eficacia sobre las plagas  como pulgones, conchuelas,  escamas, chanchitos, también afecta chinches y trips, entonces tiene un espectro importante sobre plagas relevantes que compiten con los cultivos y que afectan desde el punto de vista productivo o del punto de vista cuarentenario”.

Closer^®, conocido internacionalmente como Isocalst active, es un producto banda verde, que presenta un buen perfil ambiental, con baja persistencia en el ambiente, tanto en el agua como en el suelo, por lo que tiene poca probabilidad de contaminar napas, algo muy deseable para países exigentes como los europeos. Cuenta también con una baja presión de vapor, por lo que no representa riesgo de volatilización, y notablemente también presenta un mínimo riesgo para los polinizadores, ya que no presenta residuos tóxicos después de 2 o 3 horas de haberse aplicado. Es también bastante respetuoso con los ácaros depredadores, que son los que se alimentan de las arañitas que  dañan al fruto, manteniendo los equilibrios entre estas especies.

Respecto a las carencias en paltos, las recomendaciones de los expertos de Corteva mencionan 7 días para exportar a EEUU y 90 días para exportar a todos los otros destinos, respetando sus restricciones, incluso con dos aplicaciones durante la temporada.

HASTA DOS APLICACIONES

En cuanto a la aplicación de Closer^®, Alejandro Toro señala que en Corteva recomiendan hasta dos aplicaciones por temporada, “no más que eso”, explicando que el momento de uso  en este tipo de plagas es  al  inicio de movimiento de ninfas, “por lo que el foco es apuntar a ese estado del insecto muy sensible, más que a los huevos o los adultos, debido a su susceptibilidad y gran movilidad”, añadiendo que hay un gran riesgo de no controlar a las ninfas “porque se mueven muy velozmente e infectan la fruta, se esconden bastante rápido”. Otra dificultad que se presenta es el control de chanchitos, a los que no les gusta la luz (fotofóbicos) y se esconden, por lo que no es fácil con productos de contacto lograr controlar esas plagas que prefieren oscuridad en la canopia o buscan refugio.

Toro complementa que “Closer^® es un producto de buen perfil toxicológico (etiqueta verde) y, por otro lado, para el productor o los técnicos, presenta  alta solubilidad, que permite que se mueva muy rápido en las plantas, lo que protege estas estructuras que están más alejadas de la zona de aplicación. “En los paltos no siempre cubrimos muy bien el follaje por la envergadura de la estructura del árbol, entonces estos productos que tienen alta solubilidad se mueven muy bien hacia los brotes terminales”, comenta.

Alberto Armijo destaca que Closer^® tiene la ventaja de tener un efecto sistémico y translaminar que va a afectar a los individuos que se están alimentando en sectores que están más protegidos, como el envés de la hoja. También destaca la importancia de la aplicación en el momento correcto, ya que así como algunos autores o entomólogos han atribuido al cambio climático algunos desfases en la temporada con el ciclo de estos insectos, puede ocurrir que se hagan aplicaciones y estas no sean efectivas porque las larvas no estaban en ese momento, y han aparecido un mes después o aparecieron antes, por lo que se puede llegar o muy temprano o muy tarde a la aplicación.

“Creo que los cítricos necesitan un importante monitoreo, que nos va a dar la pauta de las aplicaciones que nosotros debiésemos realizar, dependiendo también de la zona: es distinta la aplicación que nosotros realizamos en la cuarta región a la aplicación que vamos a hacer en la sexta. El monitoreo es sumamente importante”, comenta. En esta misma línea, Armijo señala que uno de los problemas importantes que hay en los cítricos son las pocas herramientas disponibles y efectivas que podemos usar en la temporada, destacando que incluso algunas pueden generar problemas con los enemigos naturales u otros que sólo controlan estados juveniles de las plagas.

“Nosotros destacamos Closer^® porque al ser amigable con los enemigos naturales, no tenemos explosiones de otras plagas, como pasa con el caso de las arañitas, algo muy común en el caso de los paltos, ya que algunos productos pueden generar la reactivación de arañitas, y eso significa aplicar un producto de control durante un mes y otro producto luego para la arañita”, explica Alejandro Toro, refiriéndose a los desequilibrios no deseables que se pueden producir en el huerto, como ocurre con organofosforados, piretroides, neonicotinoides o carbamatos. “Creemos que estamos haciendo un aporte en haber desarrollado esta molécula, haciendo investigación en estos últimos años para demostrar que esto funciona”, concluye Toro.

CONTROL BIOLÓGICO CON CAPIREL^®

Tal como Corteva ofrece una herramienta para el control de plagas en la superficie, en el follaje de la canopia, ahora cuenta también con un nuevo producto que puede cambiar la forma en que se combaten la plagas, precisamente desde el suelo de estos frutales. Capirel^® es este nuevo jugador, que funciona como un controlador biológico para el manejo de larvas de un amplio rango de insectos de suelo, como larvas de gorgojos, burritos, capachitos, pololos, cabritos y gusanos blancos provenientes de los pololos verde, dorado y café.

Este nuevo producto, que se presenta en forma de gel, después de varios años de perfeccionar la formulación, para ser aplicado en el sistema de riego por goteo o por aspersión, sin obstruir los sistemas de riego o boquillas, y contiene millones de nemátodos entomopatógenos de la especie Steinernema feltiae, que parasitan las larvas de suelo, reducen la incidencia de las plagas y, por lo tanto, la intensidad de daño en el cultivo. “Estos nemátodos se mueven en el suelo y penetran al interior de las larvas,  parasitándolas. Una vez dentro de ellas se empiezan a alimentar de su cuerpo y la descomponen. Posteriormente el nemátodo se multiplica y cuando se muere la larva, salen miles de nemátodos que buscan nuevas presas u hospederos. Ellos van a seguir existiendo a medida que exista humedad para movilizarse y exista una presa, aumentando la eficacia mediante este control natural”, explica Alejandro Toro.

Una caja de Capirel^® significa la aplicación de mil quinientos millones de nematodos vivos por hectárea que se aplica en el riego a través de un gel que se disuelve en agua. “Es el primer producto biológico que hemos lanzado en el mercado”, señala al respecto el experto de Corteva sobre Capirel^®, producto formulado en Holanda con un trabajo que tiene más de 30 años de investigación, producido por Koppert Biological Systems.

“La importancia de Capirel^® es que hemos cambiado de productos químicos a productos biológicos, porque no afectan la vida del suelo, son seguros para el hombre y el medio ambiente y no dejan residuos”, destaca Toro, añadiendo que si un agricultor tiene muchas larvas en el suelo, esta es “una herramienta fantástica porque le va a bajar la presión en forma significativa. Es importante que haya siempre disponibilidad de agua suficiente para que el nemátodo se mueva en toda la zona donde uno cree que están las larvas”, detalla.

La aplicación de este controlador biológico, pensando en curculiónidos, se debe realizar cuando el suelo supera aproximadamente los 13°, que es el momento en que los burritos empiezan a migrar desde el suelo hacia la parte aérea, que es precisamente cuando está más concentrada la población de larvas en la superficie, lo que permitiría un mayor control. “El mejor momento para aplicar Capirel^® es cuando está la mayor cantidad disponible, idealmente empezando la primavera, y el otro peak para aplicar es en otoño, pero en primavera es más estratégico porque permite pasar todo el verano con el árbol sin daño radicular, ya que estas larvas se alimentan y consumen las raíces de los árboles”, generando stress hídrico y nutricional, menor crecimiento, entre otros síntomas”, comenta Toro.

La importancia de realizar este control subterráneo en huertos de paltos y cítricos es porque existe un detrimento del vigor de las plantas por el daño que hacen, por ejemplo, las larvas de los burritos, cabritos, capachitos a la raíz. “Aquí debe entrar en juego Capirel^®, porque empieza a trabajar sobre las larvas de los curculiónidos, generando la muerte de estos individuos en el suelo y bajando la presión de adultos durante el verano, reduciendo de forma importante las presiones de burrito”, señala Alberto Armijo. El experto reafirma además que, de acuerdo a los estudios que han realizado en Corteva, luego de dos temporadas de uso de Capirel^®, “en general los problemas pasan a ser marginales”.

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