INIA La Platina trabaja en la generación de envases activos e inteligentes
Siguiendo las exigencias de los consumidores, los avances en la industria de los envases están orientados en mejorar y asegurar la calidad de los alimentos, minimizando su impacto medioambiental. Por ello, un equipo multidisciplinario de profesionales perteneciente a la Unidad de Postcosecha de INIA La Platina, trabajan en generar envases activos e inteligentes, para convertirlos en una alternativa viable y efectiva para minimizar las pérdidas en frutas.
Los envases activos incorporan mecanismos que tienen la factibilidad de absorber o liberar compuestos al interior del envase, con el claro objetivo de mantener la calidad del producto, incluso evitando posibles contaminaciones. Principalmente, los envases activos con actividad antimicrobiana son utilizados para extender la vida útil de frutas, como en ensaladas mínimamente procesadas, listas para su consumo (IV gamma).
Para responder a esta demanda, en la Unidad de Postcosecha de INIA La Platina trabajan en la generación de un dispositivo activo con actividad antifúngica; factible de ser incorporado a los actuales sistemas de empaque para frutas de exportación.
Mientras que el caso de los envases inteligentes, es decir, aquellos envases que mejoran las tres principales funciones: contener, proteger e informar, INIA también trabaja en buscar mejores opciones para el mercado. Cabe destacar que, paralelamente, dentro de los envases inteligentes surgieron los sistemas responsivos, que son aquellos envases que generan una respuesta benéfica o informativa como resultado de un cambio específico que ocurra en el exterior o en el interior del envase.
MAYOR INVESTIGACIÓN, DESAFÍO DE LA INDUSTRIA
En ambos casos, tanto en los envases activos o inteligentes, la investigación e innovación es fundamental, sobre todo considerando el aumento de la población en todo el mundo y, por lo tanto, la demanda por alimentos sanos e inocuos. De ahí que sea fundamental asegurar la salud de las personas con este tipo de envases y que la industria asuma este desafío junto a la academia e instituciones como INIA.