Renato Manrique

La fresa peruana irrumpió con fuerza este año en los mercados globales. Al cierre de noviembre, el país ha exportado 24,3 millones de kilos de fresas, principalmente congeladas, por un valor FOB de US$ 49 millones, según cifras de Agrodata. Se trata de un fuerte incremento en relación al mismo período de 2020 cuando se exportaron 16,7  millones de kilos por US$ 36,1 millones. Un alza de 45% en volumen y de 36% en valor.

La cifra incluso supera a todo lo exportado en 2020, aun faltando el mes de diciembre, el cual es el tercer mes con más envíos, después de octubre y noviembre.

“Hay una clara diferencia frente al año anterior”, dice José Cordero, asesor internacional en berries, quien había anticipado que 2021 se cerraría con una exportación entre 25 y 28 millones de kilos. Esto, debido al fuerte aumento en áreas sembradas, con un alza entre 30% y 40%, así como un fuerte aumento de producción en el norte chico, donde se concentra el 75% de la fresa sembrada en el país.

El asesor agrega que la proyección de la fresa para el próximo año “vamos a mantener el área sembrada casi como hemos cerrado el 2021, quizás entre 3,300 y 3,500 has a nivel nacional y unas 1,800 a 2,000 has en lo que es solamente el norte chico”.

Acerca de otras zonas del país donde se está sembrando el fruto rojo, indica que las regiones de la costa norte han venido creciendo. Al respecto, subraya que hay que tomar en cuenta que son años fríos, los cuales son favorables para el cultivo de fresa en zonas como Chimbote y Trujillo, donde se viene desarrollando el incremento de esta siembra. “Prácticamente ya hay más siembras de fresa en el norte lo que es interesante”, enfatiza.

Igualmente, añade que en el sur también hay algo de fresa, “sobre todo en la zona de Arequipa, donde este año hay programas de congelado, hay empresas que van a hacer fresa congelada IQF en Arequipa, he escuchado proyectos que hay allá, así mismo igual la fresa se va hasta Tacna”. Puntualiza que en las zonas altoandinas de las regiones de Arequipa, Cusco y Áncash donde la superficie sembrada es de unas 80 has en promedio se incrementaría entre 100 y 150 has.

Asimismo, subraya que hay más empresas participando en la producción y comercialización de este frutal, “en estos últimos años van sumando algunas empresas, comenzamos el 2010 con 4 empresas, hoy en día están participando casi un promedio de 12 empresas digamos así. Entonces todos están sumando, ¿no?”, destaca.

SITUACIÓN DE LOS MERCADOS EN UN CONTEXTO COMPLEJO

El principal destino de estos envíos nacionales entre enero y noviembre de 2021 fue Estados Unidos, donde se lograron colocaciones por US$ 25.448.881 (52% del total de envíos nacionales). A continuación, se ubican Canadá con US$ 11.948.742, Corea del Sur con US$ 2.779.534, Japón con US$ 2.234.494 y otros con montos menores que sumaron US$ 211.419.

El experto, comenta que EE.UU. se mantiene como el mercado más atractivo, por lo que es el que está liderando las compras de fresas de Perú desde hace varios años, así también destaca destinos como Canadá, Japón y Corea donde se envía una considerable cantidad de esta fruta.

¿Y cómo se ha comportado el precio en estos mercados? Señala que si bien es cierto los precios en los principales destinos se han mantenido, hubo un pequeño incremento nada más en relación al 2020, pero actualmente el panorama para el sector agroexportadora es complejo debido al incremento del costo del flete marítimo. “Básicamente esto afecta la programación de envíos, ya que yo puedo tener x contenedores ya listos para embarcar pero no tengo fecha de salida o que está restringida. Entonces resta a veces a las utilidades de hoy en día de las empresas”, enfatiza.

Con respecto a la posición en que se encuentra la fresa peruana en el mercado global, Cordero expresa que debemos seguir escalando todavía, pues estamos en el puesto 25 como exportadores de fresa, esperando mejorar es ubicación al cierre de año.

En ese sentido, sustenta que hay mucho trabajo aún por hacer, “no solamente llegar la campaña y pagar un precio justo, sino que también hay que capacitar al agricultor, hay que darle alternativas de traer programas con nuevas variedades en el sentido de plantas mejoradas que tengan mejor rendimiento, mejor producción en cuanto a promedio de kilo de fresa por planta producida”.

En concordancia con ello, dice que si el agricultor posee ahora una producción de 300 hasta 600 gramos por planta, trayendo plantas F1 comercial de California o Florida tendría un rendimiento de 1.2 o 1.5 kg por planta. Por lo tanto, explica a diferencia de otros países que producen fresa, nos falta tener plantas de mejor categoría o de un vivero certificado. “Tenemos que cambiar un poco el chip al agricultor, pero reitero hay que darle alternativas al agricultor a través de asociaciones y que puedan participar en programas con entes del Estado y privados, que de esta forma le puedan facilitar un proyecto de semillas F1”, remarca