“El agua como insumo para la alimentación hoy día es escaso y tenemos que ver que, en forma solidaria, alcance para todos”
La autoridad agrícola repasó los primeros dos meses desde que asumió el nuevo gobierno, con temas que han debido abordar con urgencia: el alza de los costos de insumos para los agricultores, y la escasez hídrica en el país. “Estamos explorando producir agua, y la poca agua que hay también estamos viendo cómo utilizarla de la mejor forma posible”, comenta la autoridad, que adelanta la posibilidad de disponer de más desaladoras hacia el futuro, aunque para el corto plazo, Guajardo señala que por ahora hay que ser "austeros" y “solidarios”. Respecto a la crisis logística que preocupa a los agricultores, el subsecretario confirmó que está dentro de las preocupaciones del ejecutivo para coordinar apoyo de las embajadas en los destinos.
Por Miguel Patiño y Rodrigo Pizarro
“Ha sido trabajo duro, estos dos meses parecen más bien un año”, comenta el subsecretario de Agricultura, José Guajardo. Pese al poco tiempo desde la instalación, mucho ha sido el movimiento del ministerio liderado por el ministro Esteban Valenzuela, que han incluido un despliegue por Chile para comunicar el plan Chile Apoya del ejecutivo, que incluye un brazo con ayuda a la agricultura, como el programa “Siembra por Chile” que inyectará 30 mil millones de pesos en ayudas al sector, así como un convenio con Banco Estado con tal de apoyar en primera instancia a cerealeros y progresivamente a la agricultura en general ante un contexto de complejidades por fuerte alzas de precios en insumos como fertilizantes, así como las alzas y complicaciones en logística para los exportadores.
“Siembra por Chile es un programa con el que salimos con urgencia a apoyar a nuestros productores, porque pese a que solo han pasado 60 días, ya estamos con un programa fuerte, principalmente dado a las situaciones, por un lado climática, y porque sabemos que los productores están pasándolo mal, tienen hoy muy poca agua, las condiciones climáticas cambiaron, la producción ha ido cambiando, pero además de eso nos encontramos con que la el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania también ha generado un aumento de los costos de los fertilizantes dos o tres veces, y esto es un lamento desde Arica hasta Punta Arenas. Producir con estos precios es muy difícil”, comenta el subsecretario Guajardo.
La autoridad ministerial señala que este contexto los obligó a buscar rápidamente los recursos para ir en apoyo de los productores, especialmente los más vulnerables, principalmente campesinos y pueblos originarios, con los que el Gobierno pretende apoyar como prioridad.
Guajardo detalla que estos recursos provienen del Ministerio de Agricultura, en base a reasignaciones y ajustes que permitieron contar con este dinero, reestructurando el presupuesto del ministerio ubicado en Teatinos 40, con tal de formar este “pozo de emergencia”, comenta Guajardo.
-¿Cómo están abordando la fuerte alza en los costos, principalmente en fertilizantes, para todos los productores?
-Es un temazo, no solamente en Chile. Tuve la ocasión hace algunas semanas atrás de ir a República Dominicana a una conferencia de ministros y viceministros de agricultura, y uno de los temas que más se discutió fue el alza de los fertilizantes, no solo aquí sino Iberoamérica, estamos hablando de España, de Portugal y América del Sur, incluyendo Brasil, todos los países, lamentablemente estamos con el mismo flagelo, entonces eso nos lleva a repensar un poco lo que estamos haciendo y darle mucho más valor a nuestra producción nacional. Tenemos que pensar en abono orgánico, bio-abonos, productos que podemos recuperar desde nuestros propios desechos de la agricultura, del que podemos ir sacando nuestro propio fertilizante. Es lento, pero se va a poder. Yo siempre hago el símil de cuando se empezó con la energía renovable de paneles fotovoltaicos y aerogeneradores. Se decía que no íbamos a pasar del 2%, que era muy lento, muy difícil, que había que seguir solamente con la hídrica y la térmica. Y hoy día nos vemos llegando al 50%. Yo creo que los biofertilizantes, los fertilizantes orgánicos van a ir ocupando cada vez un espacio más importante y van a ir desplazando a lo químico. Va a haber una transición, que tiene que ser paulatina, pero tenemos que estudiar bien cuánto fertilizante le ponemos al suelo. Hoy hay bastantes estudios que demuestran que le echamos mucho fertilizante al suelo, más de lo necesario. Y eso no solamente genera un costo, sino que además vamos contaminando el suelo y vamos contaminando el agua. Entonces también eso tenemos que ponerlo dentro de nuestra retina.
En este viaje a República Dominicana también pude tomar contacto con representantes de países vecinos en particular, y conversé formal e informalmente con el representante de Bolivia, que tiene nitrógeno y fósforo. Ellos ya están exportando a Brasil, pero conversamos y estamos mirando de qué manera también nosotros, en vez de ir a buscar fertilizante a China, Rusia o Ucrania, lo podemos buscar de Bolivia, con quienes tenemos que apoyarnos. Ellos también plantearon que tienen algunas necesidades, como en hortalizas, y nos piden apoyo. Estamos haciendo las conversaciones bilaterales, respetando las situaciones internacionales que escapan al Ministerio de Agricultura, pero creo que son una buena instancia de poder ir viendo cómo vamos saliendo de este atasco que tiene nuestra cultura por el alza de los precios de fertilizantes.
-El presidente Boric ha hecho hincapié en la seguridad alimentaria, ¿cómo congenia esto con la industria agroexportadora del país?
-Chile ha tenido buenos acuerdos para exportar fruta, para exportar carne, salmón y otro tipo de productos. Ahora, cómo hacemos también para asegurar nuestra el abastecimiento de los productos, que tiene que ver con la seguridad alimentaria que el presidente nos ha pedido mucho. Los países desarrollados, en Norteamérica o Europa, exportan muchos productos, pero también aseguran su plato de comida. Y yo creo que ahí nosotros estamos al debe. Hemos potenciado mucho la importación, pero nos ha faltado cuidar algo tan sensible como es el trigo. Nosotros Chile somos uno de los principales consumidores de pan del mundo, y ocupamos harina para muchas más cosas, pero no más allá de un 40% es trigo nacional. Y lo demás tenemos que importarlo, entonces frente a una crisis como la que estamos viviendo, con una guerra, u otros problemas como un terremoto, ¿estamos en condiciones de asegurar la producción de trigo y de harina para nuestra población?. Eso es seguridad alimentaria, y como dice el ministro Esteban Valenzuela, tenemos que producir fruta y trigo, es con “y”, no es con “o”; no es fruta o trigo, es fruta y trigo. Entonces tenemos que seguir apoyando a los exportadores, que generan trabajo para los chilenos, pero tenemos que producir también nuestros alimentos.
-Gremios y empresarios han solicitado la posibilidad de que existan visas temporales para trabajadores extranjeros, debido a la escasez de mano de obra, ¿está en la agenda legislativa del ministerio?
-En conversaciones con empresarios agrícolas, comentan que el flujo de trabajadores bolivianos hacia nuestro país es muy importante y muy bien visto. Son trabajadores muy buenos. Y más que como agenda legislativa, que puede ser un proceso más largo y ahí tenemos que entrar a presentar un proyecto de ley y luego reunir los votos, queremos hacerlo trabajando internamente, por vía administrativa. Entonces estamos cruzando la calle al frente, hacia el ministerio del Interior, para buscar soluciones.
Lo conversé también con representantes bolivianos, y ellos también lo ven con muy buenos ojos, para garantizar que las personas que vienen a trabajar tengan un contrato de trabajo, un contratista que lo traiga un tiempo definido para ir y volver, una trazabilidad que le permita seguir su viaje de ida y vuelta, y que tengan la seguridad que no se verán complicados en la frontera pensando que pueden ser inmigrantes ilegales o personas que vienen a quedarse, sino que puedan demostrar con una visa especial que van a trabajar con todos sus papeles. Esto queremos hacerlo luego, para no llegar a la próxima temporada de cosecha, para llegar con esto bien aclarado.
-¿Están pensando en una similitud con California y sus visas temporales para “pickers”?
-Similar, es una de las experiencias que han dado resultados y hay que aprovecharla. No hay que inventar la rueda. Al principio todo parece difícil, imposible, engorroso, y de a poquito te das cuenta de que no, de que hay personas que saben y hay que rescatar a esas personas que han estado en procesos anteriores, y apoyarse bien. Hay muchas personas que tienen la experiencia necesaria para que esto ocurra rápido.
-Hay otra crisis en este momento que es súper problemática con la agricultura, que es el tema logístico. Ha habido muchos problemas de agricultores que han tenido problemas de llegar a distancias lejanas, principalmente a China, ¿cómo han visto este problema?
-Lo conversamos junto con el ministro en una reunión bilateral que tuvimos con el Presidente de la República y el Presidente. In situ, en ese momento pidió a su equipo asesor que se comunicaran con las embajadas y consulados en los países de destino donde hay problemas logísticos tanto para entrar a otros países como para que salieras con productos, como fertilizantes por ejemplo, que era el tema más puntual en ese minuto. Estamos activando a nuestros organismos internacionales y nosotros también tenemos agregado agrícola en varios países, y hay que recurrir a ellos también. Estamos conversando, pidiéndole que aporten allá con gestión para que se pueda entrar. El problema logístico, portuario o de navieras ha sido un temazo en este tiempo. Ya no es solamente Covid-19, no solamente precios, no solamente escasez, sino que también la logística portuaria ha sido muy, muy difícil en este tiempo.
Por eso es tan importante la buena coordinación internacional, pero por sobre todo el trabajo de investigación que se está haciendo hoy día para que la fruta tenga una mejor vida de poscosecha, que tenga una mayor durabilidad. Porque cuando empieza la temporada, los precios están buenos y la fruta se puede ir en avión, pero ya pasado ese boom inicial, después hay que empezar a mandar por barco, y eso significa 30 o 40 días que el producto tiene que estar viajando.
Creo que por el momento se está trabajando bien, pero aún así nos hemos encontrado que frente a la crisis que estamos viviendo, de guerra, de Covid, problemas internacionales, van poniéndonos a prueba, y por eso es necesario también tratar de ir resolviendo junto con el sector privado. El sector privado en Chile es potente, tiene sus redes, tiene sus contactos internacionales, y nos hemos reunido con todas las instancias exportadoras, dándoles todo el apoyo nuestro, entendiendo que también como gobierno tenemos una mirada muy urgente de apoyar a los más pequeños, a la agricultura familiar campesina, que no pueden quedarse atrás.
-¿Qué desafíos enfrenta el gobierno frente a la sequía que enfrenta Chile y la escasez del recurso hídrico, y cómo planean abordarlo?
-Es difícil producir agua y aún así lo estamos intentando. Siempre se dice que el Ministerio de Agricultura llega hasta orilla del mar, hasta la arena. Sin embargo, hemos enfrentado esta situación y estamos metiéndonos al mar, porque estamos evaluando la desalación de agua de mar. A ese nivel estamos llegando, es un tema complejo, medioambientalmente complicado, energéticamente difícil porque consume mucha energía, tiene altos costos de instalación, además qué hacer con lo que queda después, con la salmuera que queda, porque se puede producir contaminación en la zona, y luego administrativamente viene la responsabilidad sobre el agua que tú logras enviar hacia el campo, el interior ¿de quién es esa agua?, ¿cómo se gobierna esa agua? ¿es de todos, no es de nadie? ¿es de los que tienen derechos? Entonces es un tema complejo, pero tenemos la inteligencia para echarlo a andar. Hay experiencia en países que lo han hecho mucho años, como Israel, Australia, España, y por eso no hay que pensarlo todo, hay que ver qué rescatar. Y aquí en Chile hay experiencias ya en varias comunas, como en La Ligua, en la región de O’higgins hay dos experiencisa y tengo entendido que hay más experiencias en Chile que hay que visitar. Entonces estamos explorando producir agua, pero el agua que hay y la poca agua que hay también estamos viendo cómo utilizarla de la mejor forma posible.
Por otro lado, otro tema que estamos abordando es profundizar los esfuerzos por tecnificar el riego, que se viene haciendo hace años a través de INDAP o a través de la Comisión Nacional de Riego. Tenemos una deuda con los pequeños productores. La Comisión Nacional de Riego ha sido muy exitosa, pero desde ciertos segmentos hacia arriba económicamente. El empresario agrícola ha podido utilizarlo muy bien, pero el campesino tiene problemas porque algunos tienen los derechos constituidos, o tienen el capital para hacer la obra y luego no hay consultores suficientes. Entonces lo que estamos conversando con el nuevo director de la Comisión Nacional del Riego es precisamente eso. Dónde están los cuellos de botella y cómo solucionarlos. Y ojo que muchas veces no significa más plata, significa más inteligencia: cómo hacemos para que con los recursos que hay realmente lleguen al pequeño productor y también pueda verse beneficiado con esta iniciativa. El Presidente de la República lo tiene dentro de su eje prioritario, a nosotros nos hace la bajada y los principales pilares son, primero, agricultura familiar campesina; el segundo eje es el agua y el déficit hídrico; el tercer tema es cooperativismo y asociatividad; y el cuarto es seguridad y soberanía alimentaria.
-¿Los concursos de la Ley de Riego van a estar más enfocados en la pequeña agricultura?
-Siempre tienen un énfasis, siempre, pero el problema es que muchas veces la agricultura familiar campesina no puede postular a esos proyectos porque no tienen cómo. Si a un consultor tú le dices que haga un proyecto para media hectárea o uno para 300 hectáreas, obviamente que al consultor le conviene ir al más grande. Entonces ¿qué es lo que hemos dicho? Aquí hay que facilitar la participación de más consultores, necesitamos más consultores. Muchas veces hacemos procesos muy difíciles, muy complejos donde terminan los candidatos a consultores aburriéndose y no siguen postulando. Necesitamos más consultores de buena calidad, con los requisitos que corresponde, para así facilitar el acceso a que estos consultores puedan trabajar con pequeños agricultores. Yo creo que esa es una piedra angular dentro de este proceso.
-Por un lado está la eficiencia del uso del agua, pero también hay necesidades en restauraciones de obras, como rehabilitación de tranques, revestimiento de canales, ¿también está contemplado como apoyo a pequeños productores?
-Sin duda. Grandes embalses, tranques medianos, tranques pequeños, canalización, y con una mirada de una gobernanza por cuenca. Es súper importante eso y de hecho, por mi experiencia también fui aprendiendo que muchas veces cuando se intuba un canal arriba, dejas sin agua lo de abajo. Por eso hay que tener una mirada amplia de cuenca, que implica que el agua está en la cordillera, en glaciares, pero también en el río, en agua subterránea, y después sigue el caudal ecológico para seguir nutriendo a los Humedales al llegar a la costa. Todo eso tiene que estar considerado: cuánta agua hay, cuánta podrían ocupar y cómo podemos ser eficientes con eso. En estos momentos hay que ser austeros, pero hay que ser solidarios: austeros, con el uso del agua en forma muy responsable, pero también ser solidarios, porque hay muchos que también necesitan agua más abajo, y hay que hay que pensar como país, como estado y no solamente en forma individual, que es lo que nos hace muy mal.
-Con el trabajo constituyente casi terminado, ¿cómo ve lo que ha quedado en el borrador en términos de agricultura, agua -que se declaró como “incomerciable”, o seguridad alimentaria?
-Es muy importante discutir temas como este y no dejar nada tapado ni en escondido. En el tema del agua en particular, hay algo que siempre he cuestionado, que es que se puede especular con el agua. Yo creo que ese es un tema delicado, y cuando fui Seremi de Agricultura, llegaron personas a preguntarme si sabía quién vendía derechos de agua, y yo preguntaba si era para producir, sembrar y me decían que no, que era para invertir aprovechando que aún estaban a precios bajos, porque iban a subir. Entonces eso es especulación, nuestro país permite la especulación de algo que es un derecho humano, que es algo que es de todos los chilenos. Es importante que se haya discutido, más allá de estar a favor o en contra. Creo que no podemos estar enfrentando la situación de cambio climático y no discutir el tema. El agua que caía hace 30 o 40 años atrás no es lo que cae hoy día. La cantidad de personas que vivimos en nuestro país hoy día no son las mismas de aquel tiempo. Entonces el agua, como un insumo para la alimentación de todos nosotros, hoy día es escasa y por lo tanto tenemos que hacer que, en forma solidaria, alcance para todos, que sea respetado, que sea cuidada y que sea entendida como un elemento de la naturaleza, y que no podemos especular con ella generando algún daño a los demás. En ese sentido, estoy totalmente feliz de que estemos hoy día tomando decisiones como una nación grande y discutiendo los temas que son relevantes para todos nosotros.