Banasan, con una estrategia orientada al crecimiento
Como la segunda mayor exportadora de banano del departamento del Magdalena y la cuarta a nivel nacional, Banasan se ha trazado un desafío importante para este año: exportar 13 millones de cajas de banano a sus dos principales destinos, la Unión Europea y Corea del Sur.
La Comercializadora Internacional de Banano, C.I. Banasan S.A. tras 16 años de actividades en el mercado local se ha convertido en una de las alternativas más importantes en envío de banano desde Colombia hacia la Unión Europea y Corea del Sur, destinos a los que ha llegado para imponer su sello de calidad. La compañía que cuenta con fincas propias agrupadas en lo que se conoce como Sociedades Agrícolas y que además exporta fruta proveniente de productores externos independientes y aliados, es hoy en día la segunda mayor exportadora de banano del departamento del Magdalena y la cuarta a nivel nacional. En entrevista con Redagrícola, Edgar Chalhoub, presidente ejecutivo de CI BANASAN SA y Ramiro De Francisco, gerente general de Sociedades Agrícolas hablaron sobre el manejo que le dan a la fruta, las proyecciones que tienen y las principales limitantes para el desarrollo del negocio.
La historia de la empresa nació cuando tres grupos de socios deciden unirse, todos con una tradición y vocación agrícola que se remonta a varias generaciones en el negocio bananero. “Aprovecharon su experiencia como productores de banano de exportación para crear una comercializadora y así poder abrir un espacio en los mercados internacionales para el Banano del Magdalena, destacando sus características únicas en sabor y calidad. Igualmente fue un momento clave para darle la oportunidad a grandes y pequeños productores de la región de acceder a un portafolio de productos y servicios que buscan contribuir con su eficiencia y rentabilidad, asegurando procesos productivos y logísticos efectivos y sostenibles”, explica Edgar Chalhoub, presidente ejecutivo de CI BANASAN SA sobre una empresa que hoy tiene dos mercados: Unión Europea y Corea del Sur, a los que llegan solo con embarques vía marítima con ventas anuales que llegan a las 12 millones de cajas de banano.
– ¿Cómo le fue a Banasan en este primer semestre y cómo les está yendo en este momento?
Edgar Chalhoub (EC)– Continuamos con un entorno bastante complejo a raíz de la pandemia, donde los problemas en la logística mundial se han agravado de manera importante y han llegado a impactar los costos de materiales y servicios muy significativamente. Igualmente hemos tenido un reto muy fuerte para poder exportar la fruta a Corea debido a la distancia y a la irregularidad de las líneas navieras. A pesar de esto, hemos podido mantener el nivel de exportaciones, generando estabilidad a nuestros productores, gracias al gran trabajo de todos nuestros colaboradores internos y de la importante labor que realiza el grupo en materia de comercialización internacional.
LA META ES EXPORTAR 13 MILLONES DE CAJAS DE BANANO ESTE AÑO
– ¿Qué proyecciones tienen para el cierre del año?
EC– Este año exportaremos cerca de 13 millones de cajas de banano y prevemos que seguiremos siendo la cuarta comercializadora que mayores volúmenes exporta desde Colombia. Exportamos banano convencional y orgánico, con las más exigentes certificaciones internacionales, tales como Fairtrade, Rainforest Alliance, SA8000 y SMETA entre otras.
– ¿Compran fruta a terceros? ¿Qué cantidades? ¿De dónde proviene esta fruta?
EC– Compramos cerca de un 30% de fruta de productores terceros independientes, la cual proviene de fincas localizadas en el departamento del Magdalena. Tenemos una relación de varios años con cooperativas de pequeños productores, certificados en Fairtrade (comercio justo), quienes, gracias a este esquema de comercialización, reciben de regreso importantes recursos para estructurar proyectos enfocados al bienestar de los cooperados y sus comunidades. Desde la Fundación Banasan apoyamos estos procesos, además de un gran número de proyectos que han redundado en beneficio de las comunidades del Magdalena.
– ¿Qué tanta competencia hay en este mercado a nivel local e internacional?
EC– La industria de banano a nivel mundial ha presentado durante los últimos años un crecimiento sostenido en su oferta, la cual ha crecido a un ritmo superior al de la demanda, generado un estrés importante en los principales mercados y una fuerte presión hacia la baja en los precios de la caja de banano. En consecuencia, el mercado de banano es un mercado muy competitivo y el enfoque actual debe estar en la productividad en las fincas y eficiencia de la cadena de valor. A pesar de esto las comercializadoras en Colombia hemos realizado un importante esfuerzo para mantener cierta estabilidad en los precios a los productores.
SOCIEDADES AGRÍCOLAS AGRUPAN LAS FINCAS QUE PRODUCEN PARA BANASAN
De acuerdo con Ramiro De Francisco, gerente general de Sociedades Agrícolas, estas suman actualmente cerca de 2,200 hectáreas de cultivo, hoy en día, hay 2,000 en producción y 200 hectáreas se están sembrando para iniciar producción en el año 2022.
-¿Qué son las Sociedades Agrícolas que comercializan con Banasan y cómo nacen?
Ramiro De Francisco (RF)– Son las razones sociales donde se encuentran las fincas del grupo Banasan, las cuales suman aproximadamente 2,200 hectáreas de cultivo de banano. Las Sociedades Agrícola nacen por la necesidad de crecimiento del grupo y con el objetivo de asegurar un volumen de producción de áreas propias de cultivo. Actualmente, constituyen 40% del volumen comercializado por Banasan. Las fincas que hacen parte de Sociedades Agrícola se encuentran ubicadas en el departamento del Magdalena, y van desde el municipio de Ciénaga hasta Fundación, pero concentradas principalmente en el municipio Zona Bananera. A la fecha el grupo cuenta con un total de 2,200 hectáreas, de las cuales 2,000 hectáreas están en producción y 200 hectáreas se están sembrando para iniciar producción en el año 2022. Por otro lado, vale destacar que, contamos con cerca de 2,200 colaboradores entre personal operativo y administrativo.
Principales limitantes para la comercialización de banano en Colombia
De acuerdo con Edgar Chalhoub, presidente ejecutivo de CI BANASAN SA, la seguridad de la carga, la logística local y la disponibilidad de rutas son actualmente las principales limitantes para la comercialización de banano en el país.
Seguridad de la carga: Tenemos una muy fuerte presión de contaminación en la carga, lo que genera diversos riesgos para la compañía, por ello debemos hacer inversiones cuantiosas para mitigar la materialización de los mismos.
Logística local: Los altos costos de movilización de la carga y el muy mal estado de las vías son otro de los grandes retos para la comercialización de banano en Colombia. Esto tiene un impacto muy alto en la competitividad de la industria bananera del país, así como en la calidad del producto.
Disponibilidad de rutas: Una de las limitantes para poder desarrollar nuevos mercados es que no tenemos rutas confiables/estables por parte de las navieras hacia destinos no tradicionales.
– ¿Cuáles son esas limitantes que más afectan los cultivos de banano?
RF– El banano, similar a la mayoría de los cultivos en el sector agrícola colombiano padece de una serie de limitaciones y amenazas que afectan su productividad y crecimiento, Estas se podrían agrupar en estructurales y coyunturales. Inicialmente, factores como la seguridad de los activos, la fruta, y el personal son riesgos permanentes del negocio. La integridad de la carga está bajo constante amenaza por el flagelo del narcotráfico; de otra parte, la infraestructura de vías en zonas rurales y acceso a puertos; los costos de producción derivados de insumos importados (fertilizantes, agroquímicos, maquinaria) afectan el flujo normal de operaciones y actividades del sector. En temas coyunturales, tenemos limitaciones en el recurso hídrico (bajos índices de precipitación en la región Caribe) para un cultivo que es por naturaleza de bosque tropical húmedo; así mismo, el evidente impacto del cambio climático que resulta en una marcada fluctuación de condiciones del clima, pasando de épocas de sequía a inundaciones severas; la carencia de talento humano (cantidad y calidad) para soportar el crecimiento en área y necesidades de producción de la zona, sumado a barreras de contratación de acuerdo con las necesidades de la industria, donde por ejemplo no se puede pagar seguridad social proporcional a las horas/día trabajadas, son algunos de los aspectos que limitan la productividad del sector. Y no menos importante está el factor de sanidad vegetal, que trae dos tipos de retos diferentes: 1) el control de enfermedades tradicionales del cultivo como sigatoka, debido al incremento en las restricciones de productos para su control por una exigente (y creciente) regulación ambiental en los mercados destino; y 2) lo que podría ser el mayor reto para la industria en la actualidad: la aparición en el país del hongo Fusarium R4T que amenaza la estabilidad del cultivo, y para lo cual se han hecho significativas inversiones en las fincas para prevención y control de acceso de personal, vehículos y herramientas a la plantación.
– ¿Cuáles son los principales retos productivos del banano colombiano?
RF– Los retos del sector bananero colombiano son consecuencia y se derivan de las limitantes y amenazas enunciadas anteriormente, es decir, asegurar la sostenibilidad financiera del negocio ante las exigencias de un entorno de alta competitividad debido a: costos crecientes; limitaciones en mano de obra; restricciones hídricas; incremento de requerimientos ambientales y sociales; nuevas y mayores exigencias en la sanidad vegetal del cultivo; y aumento de oferta a nivel regional que genera un estancamiento de los precios en los mercados destino de las exportaciones. Estos son retos propios del cultivo de banano en la región caribe colombiana.
PROCESO PARA QUE LA FRUTA LLEGUE A SU DESTINO FINAL
Para que el producto llegue a su destino final se hace necesario la suma de varios factores determinantes y que tienen que ver, con cosechar la fruta con una edad óptima para ser cortada y que aguante ese tiempo de tránsito con un proceso de corte a frío que tiene que ser máximo en 12 horas y después debe ser sometida a tecnologías de atmósfera controlada en los contenedores que permite que la fruta dure un poco más.
– ¿Qué procesos son claves para que la fruta llegue a su destino final con la calidad deseada?
RF– La calidad de la fruta inicia desde el mismo campo, desde el inicio de la plantación debe asegurarse rigurosidad en las prácticas agrícolas con el objetivo de lograr la mejor condición de racimo posible y la protección del mismo hasta la cosecha. Además, estrictos parámetros de edad y grado de la fruta son necesarios para asegurar el cumplimiento de especificaciones y la vida verde de la fruta desde el momento de la cosecha. Posteriormente, durante el proceso en la empacadora, se deben manejar estrictos protocolos de selección, clasificación y empaque los cuales son necesarios para asegurar la integridad y calidad de la fruta previo al cargue.
– ¿Hacen uso de atmósfera controlada para conservar la calidad de la fruta?
RF– Dependiendo del tiempo de tránsito y el destino, la fruta puede ser cargada en contenedores con sistemas de atmósfera controlada (temperatura a 13 °C, sin oxígeno) la cual es regulada y monitoreada con tecnología de punta en refrigeración para de esta manera asegurar la conservación de la fruta al momento de empacarla cuando su correspondiente tiempo de tránsito a puerto es largo y/o el destino es lejano.
– ¿Qué manejo poscosecha realizan con la fruta?
RF– El manejo poscosecha incluye tiempos de residencia en tanques para la eliminación del látex de la fruta, aplicaciones de fungicidas y productos dirigidos a la conservación de las propiedades de la misma, eliminando la posibilidad de pudres y otros defectos no deseables para clientes y consumidores en el mercado externo.
– ¿Bajo qué criterios escogen la fruta que va para exportación?
RF– La fruta de exportación debe cumplir unos criterios y parámetros definidos para las distintas referencias que se comercializan y algunas veces dependiendo del destino a donde vayan. Estos parámetros incluyen dimensiones de la fruta: largo y calibre, y características cosméticas (ausencia de cicatrices, látex, óptimo estado de coronas y cuellos, entre otros).