La Unión Europea vuelve a confiar en el mango peruano
En un año típico, en el mercado europeo se interceptaban y destruían entre 1 y 15 contendores debido a la presencia de mosca de la fruta. Esta campaña, y como resultado del programa realizado en el país contra esta plaga, se pasó el examen con creces.
“Nosotros somos el principal exportador de mango fresco en el Perú”, dice Joaquín Balarezo, gerente general de Sunshine, empresa que trabaja en el cultivo del mango peruano desde hace más de treinta años. Balarezo, quien además fue presidente de la Asociación Peruana de Productores y Exportadores de Mango (Apem), agrega que la empresa que dirige compra mango de Piura, Lambayeque, La Libertad y Ancash.
“La calidad del mango estuvo buena este año, pero hay algunos retos por hacer. Primero hay que diversificar mercados, pues el 60% de la fruta peruana se va a Europa y el 30% a Estados Unidos. La calidad es un reto que estamos cumpliendo. Este año, la calidad del mango ha estado sorprendentemente buena. Para conseguir calidad, muchas veces ayuda el clima. ¿Qué nos ayudó este año? La respuesta que tuvimos frente a la mosca de la fruta y las exigencias de la Unión Europea, que significaron un riesgo y un temor para los exportadores de mango”, precisa Joaquín Balarezo, añadiendo que la UE tenía en la mira a los exportadores peruanos, pues en muchas de las intervenciones pasadas a sus contenedores se encontró mosca de la fruta. “Los que pertenecemos a Apem estuvimos muy nerviosos, pero con el Senasa hicimos un gran trabajo; consolidamos un sistema, un programa de erradicación de la mosca de la fruta en el mango, y así pudimos responderle al mercado europeo”, sostiene.
El caso es que el programa peruano de control de la mosca fue aprobado por la UE, que consiste en colocar trampas, que luego son monitoreadas por el Senasa. Si un campo presenta muchas moscas, no exporta. “¿Qué pasó con esta ‘asustada’ que nos dieron desde Europa? Pues el agricultor reaccionó, se hizo una campaña de difusión para trabajar a conciencia en los campos, sacando la maleza, realizando las aplicaciones correspondientes, controlando los cercos perimétricos, estábamos en la cuerda floja… Y hubo conciencia de la autoridad, del agricultor, sobre todo. Por ejemplo, en Motupe, tenemos mucha mosca; y sorprendentemente este año, como Sunshine, hicimos mucho más fruta en Motupe. No hubo mosca, ni larvas, ni daños de mosca en los campos. Mi conclusión es que este es un efecto positivo de todo el trabajo que hicimos”, explica Balarezo.
Sin embargo, advierte que, si en un contenedor revisado por la UE encuentran un fruto con un huevito o larva o algo relacionado a la mosca, ese contenedor es interceptado y destruido por la autoridad sanitaria europea. “Normalmente había entre 10 y 15 interceptaciones en una campaña. Y en esta última campaña no debe haber habido ni 3. Hemos pasado el examen, hemos vuelto a ganar la confianza de las autoridades sanitarias de Europa”, asegura Balarezo.
EL SECRETO ES ESTAR EN EL CAMPO
El reto ahora es mantener lo bueno que vienen haciendo desde el campo, Senasa y las empresas exportadoras. “La buena calidad hay que mantenerla”, dice Balarezo. “Nosotros como Sunshine compramos mango a muchísimos agricultores; tenemos quince agrónomos para darles asistencia técnica todo el año; el secreto es estar allí”, añade. Esa labor técnica está basada en asesorar en la colocación de trampas para el constante monitoreo. Tras ello, se requiere la aplicación de insecticidas y se continúa con el control ecológico, que tiene que ver con mantener los campos limpios de malas hierbas, de limpiar zonas hospederas, de mantener los cercos… “Ese es el tercer secreto”, asegura. “Realizando esas tres acciones, puedes llegar a una cosecha con muy poca población de moscas. Otra cosa a tomar en cuenta tiene que ver con el hecho de que la mosca entra al fruto cuando este madura. Entonces, debemos cosechar a tiempo, cuando los frutos están verdes”, precisa.
El empresario subraya que el mango peruano tiene una gran calidad en cuanto al sabor, color y aroma. Lo que ha estado jugando en contra a la industria nacional del mango han sido las plagas. “Eso es lo que hay que controlar y lo hemos hecho bien. Pero también le tuvimos que decir a las autoridades europeas el año pasado que el Estado peruano cuenta con un programa de erradicación de la mosca de la fruta. Ojo que estamos hablando de erradicación; ya no se trata de un programa de control. El Estado se ha comprometido a priorizar la zona norte del Perú”.
Para exportar mango a los EE UU, las empresas peruanas deben hacer un tratamiento hidrotérmico, algo que les resulta más caro. “En Estados Unidos no hay mosca de la fruta, y ese tratamiento mata la mosca. En Europa no nos piden tratamiento hidrotérmico porque ellos tienen mosca de la fruta allá. Entonces, si tienes una zona con una plaga erradicada, ya no hay tratamientos cuarentenarios que hacer; el país receptor solo se limita a certificar que no tienes mosca, sin ningún tratamiento hidrotérmico de por medio. Eso es mucho mejor para todos. El programa de erradicación que el Perú ha presentado a la UE es un programa que implica un compromiso estatal. Y ese es otro reto: que este programa se mantenga; eso lo único que va a traer beneficios para todos”, finaliza.