Un riego más oxigenado con nanoburbujas (ONB) genera resultados importantes respecto de la eficiencia hídrica, productividad y calidad en diferentes cultivos frutales y hortalizas. Los múltiples resultados a nivel comercial demuestran que la inyección de ONB permite grandes impactos en la agricultura, ya que genera un manejo sustentable de los pilares de la producción de alimentos: Planta, Suelo y Agua.

Esta tecnología es producida en California, en la fábrica de Moleaer Inc., empresa estadounidense globalmente reconocida por esta solución libre de químicos, que aporta a la eficiencia en la inyección de gases en múltiples procesos que utilizan agua. Moleaer está presente en 32 países con más de 2.000 proyectos.

Gracias a la estabilidad y características únicas de las nanoburbujas, esta solución permite inyectar eficientemente oxígeno vía riego a los cultivos. En Chile y Perú la tecnología es distribuida por Kapicua, startup especializada que cuenta con alquiler y venta de equipos, además de servicio técnico local.

BENEFICIOS EN FRUTALES

“En arándanos, los resultados son significativos en todos los aspectos evaluados. Las mediciones arrojaron un incremento del 18% en la producción, un 11% en el diámetro del fruto, incremento de la acumulación de clorofila en un 9,5%, mayor densidad en raíces y tasas de crecimiento de brotes post poda un 30% mayor”, comenta Gert Jan Schep, Country Manager Kapicua Peru, distribuidor oficial de la tecnología.

Cabe destacar que las nanoburbujas de oxígeno permiten aumentar la calidad de los cultivos agrícolas y suprimir el desarrollo de patógenos que afectan las raíces, favoreciendo la microbiología benéfica del suelo. Además, mejoran la floculación de suelo y por ende la compactación, añade el representante de Kapicua.

“En paltos contamos con varios clientes, además de ensayos con centros de investigación. Recientemente terminamos una evaluación de dos años en un productor de variedad Hass, con uso en un huerto desde el año 1, en donde pudimos cuantificar un impacto significativo sobre el crecimiento de brotes y en la masa radicular, al término del primer año de uso. Al cierre de la segunda campaña, el tratamiento con nanoburbujas obtuvo una mayor cantidad de plantas con mayor expresión vegetativa, evidenciando un 17% más de altura y un 21% más en el ancho de las plantas”, detalla Gert Jan Schep.

Este efecto en el vigor -debido a una mejor condición radicular y por lo tanto una mejor absorción de nutrientes y agua-, afecta directamente a la condición de los árboles y como consecuencia a la cantidad de frutos por planta, manteniendo siempre una buena calidad y calibre. En el tratamiento con nanoburbujas, se evidenció un 165% de aumento de frutos en la planta, versus un tratamiento sin nanoburbujas.

“Además, se puede evidenciar una mayor precocidad en el cultivo, aumentando la cantidad y calidad de las primeras cosechas, incrementando la rentabilidad del huerto” sostiene Benjamin Labbé, Gerente de Negocios de Moleaer LATAM.