Este 2021 será el año comercial más complejo en la última década para las nueces chilenas, principalmente por el anuncio de California del aumento en un 19% del volumen de su cosecha, estimando la producción 2020-2021 en 707.600 toneladas métricas. Con un mercado golpeado por la pandemia del Covid-19, con precios a la baja, dicha situación genera un importante desafío para la producción de nueces de calidad en Chile, que ha presentado constantes complicaciones en las últimas dos temporadas por el efecto de la sequía. Este año se estima un déficit hídrico entre el 40% y 25 % en el país, dependiendo de la zona geográfica.

El mercado pasará una cuenta más alta por la calidad de la producción. Esto se refiere a que, probablemente, exigirá nueces con calibres sobre 32 milímetros de diámetro para lograr los precios mínimos. Como se pudo observar constantemente este año comercial 2020, el mercado generó un fuerte descenso en los valores de las nueces bajo 30 milímetros. Si observamos las estadísticas publicadas por ChileNut (Asociación de Productores y Exportadores de Nueces de Chile), se aprecia que los precios de bajos calibres son preocupantes.

En ambas variedades –Serr y Chandler– la tendencia productiva en nuestro país de los calibres se presenta sin grandes variaciones. En Chandler hay un 11% de la producción bajo los 30 milímetros y un 21% en el calibre de 30/32 milímetros. Esto genera que el kilo pueda tener un 32% de nueces con bajo calibre y precio, lo que tendría como consecuencia un castigo en el mercado. Dicha cifra es preocupante, debido a que es complejo tener un promedio de calibre que será fuertemente discriminado en precio, como ocurrió en la cosecha actual de 30 milímetros, donde se dio un valor de US$ 0,80 a US$ a 1 por kilo, con lo cual no se pagan los costos productivos.

La segunda arista comercial que plantea esta situación es la composición general de cada kilo de nuez. Al desplazar la curva de los calibres más pequeños, que es este promedio de 32%, reduciéndola a un 8% o 10%, se mejora en un 22% el valor de venta del kilo de nueces y se logra directamente un aumento del peso o retorno de la cosecha, ya que las unidades de nueces son más grandes y pesadas.

He observado esta tendencia en las producciones de mis asesorados desde el año 2014, con un directo impacto comercial. En un mercado que hoy se encuentra con una demanda hacia el alza de calibres, llegando a 34-36 milímetros y 36-38 milímetros, desplazando los calibres medianos en un 25% a calibres más grandes, se puede lograr un aumento exponencial de rentabilidad por precio de venta mayor en un 15% a 20%. En conjunto, logramos el aumento del peso de cosecha entre un 10% a 20%. Con esta eficiencia se puede recuperar la rentabilidad del campo, evitando que esta cosecha sea de un precio regular. Moraleja: las nueces buenas y grandes se venden solas, independiente de la situación de mercado, y las calidades bajas son poco atractivas, caras de procesar en la industria.

Observando el grafico de Chandler, podemos demostrar que, si un productor no está logrando su objetivo de calidad y calibre es por algo. Su peor negocio hoy es abaratar costos para vender una nuez sin precio. Este año, más que nunca, hay que invertir para lograr calidad con rentabilidad. En Elite Walnut Global somos especialistas en esto. Todos los escenarios se pueden mejorar con la estrategia correcta.

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