“El inversionista en cítricos está apostando por una nueva línea de negocio”
Variedades ‘premium’ de mandarina y limón Eureka están asomando en la canasta exportadora citrícola, como una forma de diversificar el negocio y buscar nuevas oportunidades en los mercados, sobre todo tras campañas que no han sido de las mejores, comercialmente hablando.
Por Marienella Ortiz
Cada variedad de mandarina es un mundo aparte. Y cada una de ellas se ha hecho un lugar en el mundo. En la foto de la campaña 2022, aparece una indefensa Satsuma que veía cómo su principal mercado, Rusia, se desplomaba; a una excesiva presencia de W. Murcott y Tango, que comenzaba a generar cierto desinterés en los mercados; pero también a mandarinas ‘premium’ como Orri, Primosole o Nova ganando protagonismo y buenas miradas entre los clientes de los diferentes mercados.
Situaciones disparejas en un sector que no ha vivido campañas oscilantes en el último tiempo, marcadas por la guerra y la crisis logística ocasionada por la guerra entre Ucrania y Rusia. Debido a ello, hay quienes están replanteando su negocio o o cambian su apuesta por otras variedades o por otros cítricos, como se observa con el limón Eureka, según observa el presidente de Procitrus, César Pescheira.
Como balance del 2022, el sector ha registrado una ligera retracción en sus volúmenes exportado de -2%, en comparación a un año anterior. Un tema que ha tenido un importante impacto en la rentabilidad son los sobrecostos, en especial de los fletes de las navieras. Si antes costaba embarcar un contenedor de fruta entre US$4.500 y US$4.800, en 2022 el flete se cotizó entre US$9.000 y US$12.000, dependiendo del destino. “En muchos casos, estas alzas son superiores a la rentabilidad esperada en el cultivo de cítricos, siendo este un negocio de pocos márgenes, más de volúmenes”, sostiene Pescheira.
A nivel comercial, el negocio se vio afectado por la guerra de Rusia-Ucrania. Esto alteró el normal abastecimiento de los volúmenes que año a año se enviaban al mercado europeo. A ello se sumó que los aún efectos de la pandemia aminoraron la demanda por las frutas frescas, entre ellos la mandarina.
En EE UU se registraron otros problemas, sobre todo de tipo sanitario. Como consecuencia de una demanda contraída y un volumen mayor de mandarinas, los inventarios de fruta se movieron muy lento. Entonces, debido a que las mandarinas permanecieron más tiempo guardadas, se detectaron problemas sanitarios, en especial, Cladosporium, un hongo que daña la piel de la mandarina con la aparición de manchas marrones, originando su descarte. Así, al cierre de la campaña, el conjunto de este subsector tuvo una caída del 2%, pasando de 269.000 toneladas exportadas en 2021 a 264.000 toneladas de la pasada temporada.
NUEVO PORTAFOLIO DE CÍTRICOS
-¿Cómo se explica esa reducción?
-Las condiciones en el mercado exterior fueron tan, pero tan complicadas, que aquellos cítricos que históricamente registran menos retornos cayeron sus envíos en el 2022, entre ellos los tangelos y las naranjas. Los envíos de tangelo han caído 35% y la naranja 57%. El que sí ha subido, por ser una novedad y una nueva línea de negocio, es el limón Eureka. Igual, los volúmenes aún son muy pequeñitos, pero es interesante ver un crecimiento del 113%, al pasar de 1.822 toneladas en el año 2021 a 3.886 toneladas en el año 2022. En todo caso, esto te indica que el inversionista en cítricos está apostando por una nueva línea de negocio o está pensando en un cambio de tipo de cítrico. Probablemente, tenía una naranja o una toronja y ha decidido sacarlos para incursionar en el limón Eureka.
-¿Este negocio se viene explorando más en el norte del país?
-En efecto, el limón se está sembrando más en el norte, lo que hace pensar que son siembras nuevas. El Eureka es el típico limón amarillo que suelen poner en los tragos en EE UU o en otros países. También lo usan para ensaladas.
-¿Qué ha pasado con las mandarinas que representan los mayores volúmenes de exportación citrícola?
-La mandarina terminó el año con un aumento del 4%, lo que no quiere decir que todos los productores de mandarina hayan tenido resultados positivos. Finalmente, la fruta que hubo se exportó. Como comentaba, los problemas fueron muchos y el retorno en mandarina ha sido más acotado que otros años, diría bastante más acotados, y con resultados negativos en algunos casos.
-¿Cuál fue el comportamiento de W. Murcott y Tango?
-W. Murcott, por ejemplo, no ha tenido crecimiento; ha mantenido el mismo volumen que el año pasado. En cambio, Tango tuvo un crecimiento de 17%. En cambio, Satsuma, por el contrario, tuvo una contracción del 18%. Precisamente esta es la que menos ha logrado defenderse, justamente por los problemas que ha habido de sobrecostos.
-¿Por qué no pudo defenderse?
-Lo que pasó fue que cuando empezó la campaña de satsuma recién se iniciaba la guerra entre Rusia y Ucrania. Todavía no se sabía el impacto que podía tener en el mercado europeo. Mucha Satsuma ya se encontraba en el mercado europeo y los precios empiezan a bajar por caja de mandarina. Entonces, estando la fruta allí, lo único que se trató fue vender al mejor precio que se podía para reducir el impacto.
-A partir de ello, algunos quizás no exportaron.
-De hecho, cuando esto se comenzó a notar, varios agricultores destinaron su fruta al mercado local. En las satsumas tienes diferentes líneas. La campaña comienza con la línea de la Miho Wase, que es la más temprana. Luego vienen las satsumas Okitsu, que también son tempranas, y de ahí va migrando la exportación a la Satsuma Owari, que es un poco más tardía. Terminas con la satsuma Aoshima y otras variedades. La campaña de satsuma desde la temprana hasta la tardía puede ir de finales de enero o febrero hasta junio. Es una campaña larga.
LAS CLEMENTINAS NO HAN SIDO EXITOSAS
-¿Qué pasa con las clementinas en Perú?
-Se estuvo haciendo grandes esfuerzos y pruebas para ver cómo se comportaban, pero no han sido totalmente exitosas esas experiencias. Ha habido algunos casos puntuales en que sí les ha funcionado, pero no ha sido lo común. Más bien, últimamente, otras variedades como la Orri, Nova o Primosole se están instalando al parecer con buenos resultados. Lamentablemente, W. Murcott y Tango se han sembrado en muchas áreas y creo que ya estamos entregando mucha fruta al mercado.
-¿Pero el consumidor es el que pide otras variedades?
-El consumidor siempre te va a pedir una mandarina con un color anaranjado intenso, casi rojo, con calibres adecuados de acuerdo al mercado. Por ejemplo, en Europa, los calibres deben ser más medianos, mientras que en el americano quieren un poquito más grande la fruta. De sabor, se busca una mandarina con un alto grado Brix (12 a 14) y con una acidez en el ideal que esté entre 0,8 y 1.
-¿Con las variedades Orri y Primosole es más fácil cumplir con esas características?
-Lo que pasa es hay que diversificar y hay que comenzar a salirse de las variedades que no están dando tan buenos resultados. Perú ha sido, por excelencia y desde hace años, un país satsumero. Desde hace por lo menos 20 años vengo escuchando ‘a la satsuma hay que sacarla’ y, sin embargo, ha sobrevivido, salvo el año pasado que fue muy difícil por los costos. En todo caso, se mueve en ciertos meses y luego entran las nuevas: Nova, Primosole, incluso la Tango y la W. Murcott.
-¿La ventana comercial se ha extendido?
-Sí, los envíos llegan hasta septiembre, por estas nuevas variedades que aparecieron: Nova, Orri, Primosole y Tango.
-¿Estas variedades y ‘premium’ las veremos más en campo?
-Hay gente que ha empezado a sembrarlas un poco más. Sin embargo, con los resultados del año 2022, hemos hecho una serie de consultas interna a los asociados para ver qué es lo que están proyectando. Con estos problemas de sobrecostos navieros y de producción, arroja una tendencia de corto y mediano plazo de reducción de áreas de cítricos. Algunos están pensando en irse a otros cultivo. Otros están pensando en migrar a un cítrico diferente, que pueda manejarse con un menor costo de mano de obra.
“Este año va a ser muy difícil hacer estimados por todo lo acontecido en el 2022. Algunos agricultores evaluarán la posibilidad de dejar una mayor cantidad de fruta en el mercado local, por temor a un mercado extranjero con una demanda acotada”.
2023, UN AÑO DIFÍCIL PARA HACER PROYECCIONES
-¿Podemos estimar cómo caminará la campaña este año 2023?
-Este año va a ser muy difícil hacer estimados por todo lo acontecido en el 2022. Algunos agricultores evaluarán la posibilidad de dejar una mayor cantidad de fruta en el mercado local, por temor a un mercado extranjero con una demanda acotada y si persisten los sobrecostos logísticos. Como gerente de Agrícola Copacabana, no como presidente Procitrus, siempre de mentalidad exportadora, voy a seguir haciendo mi mayor esfuerzo por lograr lo mejor y seguir atendiendo a nuestros clientes, obviamente siempre mirando la rentabilidad del negocio.
-Imagino que los clientes siguen teniendo interés por comprar fruta peruana.
-La fruta peruana se ha ganado su sitio. Es una fruta que es demandada, incluso, puedo decir que hasta preferida. El mensaje es que tenemos que ir mirando la campaña día a día y tomar las mejores decisiones en este año 2023.