Perú camino a ser el mayor proveedor de arándanos del mundo
Esta campaña 2019-2020 se proyecta que las exportaciones peruanas se encaminen a las 100.000 toneladas de arándanos. Así, la industria peruana se antepondrá inevitablemente a fruta de otros orígenes y, por consiguiente, se espera una disminución de precios. Según las proyecciones más optimistas, Perú está ‘ad portas’ a convertirse en el primer exportador de arándanos del planeta.
Las inversiones en el cultivo del arándano continúan imparables en la costa peruana, en especial, en los valles de Chavimochic y Olmos, zona norte del país, que concentrarán el 80% de la oferta. El mayor peak de inversiones en campo se calcula se alcanzará en el 2021, año que, se presume, cerrará con unas 12.500 ha instaladas en el país. Para el cierre de 2019 se calcula que habrá 8.000 ha, con grandes posibilidades de superar ese número.
Campaña tras campaña, la producción de arándanos en Perú ha crecido a tasas espectaculares. Solo entre los años 2012 al 2018, la producción se expandió un 206%. A la par con este desarrollo en campo, se han sucedido una serie de inversiones en infraestructura poscosecha, e incluso se han anunciado nuevas recientemente. Así, por ejemplo, se informó sobre la próxima ampliación del packing de arándanos de Complejo Agroindustrial Beta en Olmos, además de la nueva planta de procesamiento y empaquetado de arándanos en el distrito de Salaverry, en Trujillo, a cargo de Danper.
Son inversiones millonarias y necesarias para seguir siendo competitivos en una industria que durante la campaña pasada exportó US$548 millones, cifra que quedará pequeña este 2019, sobre todo cuando un reciente estudio de la entidad financiera, Scotiabank, proyectaba que este año los envíos de la fruta cerrarían en un monto cercano a los US$830 millones, lo cual significa una expansión del 34%. Si bien los mercados de destinos se concentran en EEUU y Europa, el incremento del volumen exportado también se debería a que el fruto cuenta con más puntos de destinos. A la fecha, Perú exporta arándanos a 24 países, indicaba el reporte del banco.
Roberto Vargas, director de Agrícola Santa Azul y presidente de Proarándanos, también comenta que una buena opción es China, mercado que se abrió hace dos años. Y se prepara para enviar su fruta a India y Taiwán. Más cerca está este último mercado, sobre todo tras la visita que realizaron a inicios de este año funcionarios de la autoridad sanitaria de Taiwán (Oficina de Inspección y Cuarentena de Sanidad Animal y Vegetal de Taiwán, BAPHIQ, por sus siglas en inglés) viajaron hasta Perú para verificar las condiciones y procesos a los que se someten los arándanos, con el fin de autorizar la exportación de estos berries. Así, verificaron las acciones que se llevan a cabo en cuanto a control, cuarentena y supervisión para exportar productos frescos libres de plagas desde Perú. No son los únicos destinos con los que se está negociando, ya que también asoman en el horizonte la futura inclusión de Corea del Sur y Japón.
PERÚ SE EMPINA COMO EL PRIMER EXPORTADOR MUNDIAL
Si bien actualmente Chile es el principal exportador de arándanos, la empresa de análisis comercial FreshFruit estima que hacia el próximo año Perú le quitará ese sitial, convirtiéndose en el primer proveedor global de este berry. Esto debido a que el crecimiento ha sido continuo. Se estima que la superficie crece a un ritmo de entre 1.500 y 2.000 ha cada año, teniendo al norte del país, y más específicamente a La Libertad, como el epicentro productivo. Al clima se suma la disponibilidad de agua y la opción de compra (o arriendo) de terrenos de gran tamaño.
SE PRONOSTICA UNA CONTRACCIÓN EN LA RENTABILIDAD DEL NEGOCIO
El ritmo imparable de volúmenes de exportaciones tendría, sin embargo, algunas consecuencias en la rentabilidad del negocio. Por ejemplo, Fresh Fruit destaca en que la semana 29 de la última campaña 2018/2019 el valor del precio del arándano cayó en un 31%. A la fecha el precio promedio alcanza US$7,55 por kg. Previamente, en la temporada 2016/17, el precio promedio fue de US$8,55/kg, mientras que en la 2017/18 sufrió una leve baja, para situarse en US8,45/kg. La expectativa es saber hasta cuánto caerán los precios con mayores volúmenes de oferta. La historia será muy diferente a lo que ocurría hace cinco años atrás, cuando los pocos jugadores que comenzaron con la aventura exportadora lograban precios superiores a los US$20/kg.
En cuanto a mercados de destino, son (y se prevé que sigan siendo) tres destinos los que concentran más del 80% de las exportaciones peruanas de arándano: EEUU (47%), Países Bajos (25%) y Reino Unido (10%).
UNA MAYOR VENTANA COMERCIAL
“No queremos convertir los arándanos en bananos, es decir, que sean comoditizados, pero es inevitable, entonces, lo que hay que buscar es eficiencia”, analizaba Miguel Bentin, vicepresidente de Proarándanos y gerente general de Valle y Pampa, tras participar en un seminario internacional sobre este berry, realizado en Lima, recientemente. Para la actual campaña, no duda que nos encaminamos a las 100.000 toneladas producidas. Los estimados preliminares nos hablaron que ese volumen se lograría recién hacia el 2021, pero los productores locales ya han dado muestras de su insaciable apetito por el negocio arandanero. Con tal crecimiento de fruta, Bentín refiere que el Perú ya comienza a tener presencia prolongada en los mercados de destino y ya no, como en un inicio, de solo algunos meses, focalizados al término del año. En especial, comienza a anteponerse a otros jugadores de Sudamérica, como son Argentina, Uruguay y Chile.
En general, el mercado mundial del arándano creció en 2018 un 9% en volumen y el Perú lo hizo en 65%, así que siguiendo esa tendencia, Bentín no duda en afirmar que seguirá contrayéndose la producción menos competitiva de países que están siendo apretados por la oferta de Perú. Perú saca su fruta naturalmente más temprano que Chile, mientras que aquella que proviene de México es más temprana.“Si uno ve el ingreso de la fruta a EE UU., hay orígenes que están contrayendo su oferta, ya sea porque están reduciéndose por competitividad o porque están derivándolo a otro lado. Perú y México están comenzando a copar espacio, pasando a tener 65% del mercado”, menciona.
¿QUÉ HACE COMPETITIVO A PERÚ?
¿Qué hace y qué no hace competitivo a un país? Explica que en primer lugar este es un negocio logístico, entonces, es necesario tener una gran capacidad de transportar estos volúmenes vía marítima, para que sea viable obtener una rentabilidad que cada vez se ha visto reducido por una mayor oferta. Sobre este punto hace mención el caso de Argentina que transporta casi la mayor parte de su producción vía aérea. “Los cuatro jugadores –Perú, México, Argentina y Chile- van a tener que utilizar sus fortalezas y tratar de manejar sus ventajas con sus debilidades para poder mantenerse”, sostiene.
Por tener una temporada larga, Bentín también explica que Perú no tiene el problema de saturación en determinados momentos, de generar eventos de sobreoferta en semanas específicas. Entre septiembre e inicios de octubre, se exportó un poco más de 5 millones de kilos por semana, aunque el pronóstico era de 4,1 millones de kilos. Sin embargo, todo fue manejable. En general, considera que existe la capacidad para producir 10 meses al año sin problema alguno.
En cuanto a buscar otros mercado de destino, refiere que la evolución de Asia es todavía un poco confusa y se irá viendo en el futuro cómo camina. Lo cierto es que el mercado de EE UU seguirá siendo atractivo porque es más estable, puede absorber grandes volúmenes y es más permeable a problemas de calidad que presente la fruta.
Otro aspecto que destaca Bentín es que si bien el negocio ha crecido exponencialmente, la curva de aprendizaje de este cultivo aún está en proceso y, por ende, vemos resultados dispares en cada zona del país. Eso queda claramente graficado si se observa la productividad por regiones. Según datos de la Dirección General de Seguimiento y Evaluación de Políticas del Minagri, el rendimiento alcanzado en La libertad sobresale al resto con 16,8 t/ha al 2018, superior, incluso, al promedio nacional, que es de 15,3 t/ha. En tanto, Lambayeque registra 15 t/ha, Ica 8,2 t/ha, Lima 4,5 t/ha y Áncash 4,1 t/ha.
MANO DE OBRA, PREOCUPACIÓN PERMANENTE
Un reto adicional para el sector es cubrir la alta demanda de mano de obra, que es una permanente preocupación por el tamaño de las operaciones en el país, con huertos de arándanos que pueden sumar unidades de hasta 3.000 ha.
VARIEDADES EN CRECIMIENTO
Hace solo dos años, el 90% de los campos cultivados eran de Biloxi, pero se estima que al 2018 cayó a un 30%. Sin embargo, es una variedad que no desaparecerá del todo porque tiene rendimientos locales altos y ya se conoce su manejo. Según estimaciones que han realizado expertos, se pronostica que para el 2021 solo un 20% de la superficie será de Biloxi, es decir, sumarán apenas 2.500 ha. En paralelo, habría unas 3.000 ha de variedades club, entre las que destacan aquellas del programa de origen australiano OzBlu, Driscoll’s, FamilyTree y Hortifrut.
GRANDES JUGADORES
No cabe duda que los grandes jugadores en el negocio de los berries son Camposol y Hortifrut. Luego de haber sido una empresa centrada en las conservas, el 50% de las exportaciones de Camposol en el 2018 están concentradas en el arándano fresco. La empresa tiene instaladas más de 2.000 ha en sus terrenos en Trujillo y la expectativa es seguir creciendo. Sobre este punto, el CEO de la compañía, Jorge Ramírez, afirmó recientemente que están buscando terrenos fuera del país, para lograr un abastecimiento de fruta las 52 semanas del año. Lo propio ya hizo con la palta y su compra de terrenos en Colombia.
En tanto, Hortifrut Perú (nacida de la fusión entre la peruana Talsa y HortiFrut de Chile) va camino a las 2.000 ha en la provincia de Virú, en Trujillo, y en la campaña 2018/2019 exportó alrededor 30.000 toneladas de arándanos.
“Hay un centro de investigación y desarrollo de nuevas variedades de arándanos en Perú, ya que cada variedad tiene su propia particularidad en relación al tema climático, suelo, agua”, explicaba recientemente a Redagrícola, Rafael Quevedo, fundador de Talsa.
Ambas empresas vienen trabajando su cadena de comercialización en punto de destino, gracias a que tienen constituidas empresas subsidiarias, sobre todo, en EEUU. Por ello, los principales compradores de la fruta peruana en el mercado nortemericano fueron Hortifrut Imports S.A. (con 36% de participación) y Camposol Fresh USA INC. (29%), según informa FreshFruit.
Otras empresas están haciendo una apuesta al mercado chino, aún en proceso de ser conquistado por la fruta peruana. La empresa Hass Perú comenta que ha logrado durante el 2018 expandirse en ese país, donde la calidad es altamente valorada. Luis Rodríguez, gerente de operaciones de la empresa, refiere que trabajan bajo el estándar de calidad chino y no de EEUU. Con ello se aseguran una fruta competitiva para todo mercado.
Con 17 variedades, muchas de las cuales son patentadas, dice que genética ayuda mucho en lograr esos estándares. Así, por ejemplo, en China, si llega una fruta con buena apariencia, pero que, al morderla no tiene fibra o dulzor, se la ‘castigará’ en precios. Aunque la que cumple con todos los estándares que requiere el comprador chino, será ‘premiada’.
En tanto, otras empresas siguen con sus planes de inversión de igual nivel de ambición. Complejo Agroindustrial Beta espera pasar de 600 a 1.000 ha. Para ello, ha anunciado que ampliará su packing de arándanos. Gracias al empuje del arándano a lo que suma su apuesta por las paltas. Beta estima ventas como compañía por US$ 180 millones durante 2019. Igual de importante son las inversiones que se vienen desarrollando en todo lo que es poscosecha. Al igual que Beta, Agrícola Cerro Prieto estima que finalizará en octubre la construcción de su planta de procesamiento de arándanos en Chiclayo, Lambayeque.
El presidente de Proarándanos, Roberto Vargas, opina que habrá un incremento de las exportaciones de arándano congelado. Calcula que entre el 5% y 20% por empresa se podría destinar para congelado y eso significa volúmenes grandes. En todo caso, esa línea de negocio en cuestión de poco tiempo se desarrollará en el país.