“Las grandes empresas peruanas están asumiendo el reto del desarrollo de portainjertos clonales”
Los programas de mejoramiento genético en palto se han centrado en la búsqueda de una alternativa a Hass. Ya han surgido algunas como Maluma, Carmen o GEM, pero no ha habido un gran desarrollo de portainjertos. En EE UU, Sudáfrica o Israel se ha optado por el uso de portainjertos clonales, pero en países como México o Perú aún su adopción es incipiente, aunque en este último ya hay algunas experiencias.
Concretamente en México, la producción de plantas de palto está basada en el uso de portainjertos originados por semilla. Si bien estos no son del todo indeseables, provocan una variabilidad de plantas en los huertos, a lo que se suma una mayor susceptibilidad a las enfermedades, plagas, salinidad y otros factores. Por ello es que su uso está aumentando. “Necesitamos portainjertos clonales”, afirma Alejandro Barrientos, experto en propagación clonal de la Universidad Autónoma de Chapingo. Conocedor de la realidad peruana, conversó con Redagrícola sobre la expansión de esta técnica en ambos países. En Perú, el uso de portainjertos clonales se está expandiendo, sobre todo porque, tras una serie de ensayos, se ha logrado un mayor crecimiento radicular, se obtienen plantas más uniformes y con ellos se ha conseguido resistencia a Phytophtora cinnamomi.
–¿Cómo ves el desarrollo de los portainjertos clonales en Perú?
– Las grandes empresas peruanas están asumiendo el reto del desarrollo de portainjertos clonales. Están seleccionando portainjertos, por ejemplo, sé que Camposol está haciendo este trabajo y ya tienen unos muy buenos. Arato también están haciendo un trabajo similar. Ellos están generando sus portainjertos de las mejores plantas productoras. Ya no son los portainjertos originales, sino selecciones hechas aquí en Perú.
–¿En México es menos fuerte la tendencia?
–En México hay algunos problemas, pero no tan fuertes como aquí. En Perú hay un clima extremo, donde la planta está sometida todo el tiempo a estrés. Entonces hay que tener un portainjerto que pueda absorber agua eficientemente y llevarla a la parte superior. Hay demasiada demanda atmosférica de humedad, entonces la planta debe estar con sus estomas abiertos, jalando agua en todo momento. Cuando se rompe el balance y hay más transpiración que absorción de agua, es cuando sufre la planta. Entonces, debemos tener un portainjerto que sea capaz de mandar agua a la parte superior. Eso está muy relacionado con la genética y algunos aspectos anatómicos, como es el grosor de xilema. Cuando tienes elementos de base más estrechos, son más eficientes en conducción de agua. Eso es lo que hemos visto aquí.
–¿En México no son tan necesarios los portainjertos clonales pues hay mejores condiciones de suelo y de clima?
– En cierta medida, pero ya están habiendo problemas, porque Michoacán no es solo la única zona productora. Jalisco ya ha empezado a producir y tiene problemas de suelo. Situación similar se está viendo en la zona cafetalera, por ejemplo, en Huatusco, Veracruz, donde están arrancando café y poniendo aguacate. En Chiapas, al sur de México, también están instalando huertos de aguacate, en condiciones de suelos arcillosos. Hay muchos problemas donde antes no había y que se espera solucionar con este tipo de portainjertos.
–Ello motivará un mayor uso en México
–Exacto. Se vienen los portainjertos clonales.