Cítricos sudafricanos en la mira: organizaciones españolas sugieren cierre de importaciones
Creciente preocupación por la mancha negra causada por el hongo Guignardia citricarpa en estos frutos provenientes de áfrica, luego de registrar 20 detecciones en solo tres meses, lo que ha llevado a los agricultores a exigir medidas para proteger sus cultivos.
La organización española AVA-ASAJA, exigió a la Unión Europea el cierre inmediato de las importaciones de cítricos de Sudáfrica, debido a la alarmante detección de 20 casos de mancha negra, una enfermedad causada por el hongo Guignardia citricarpa, que afecta principalmente a productos como naranjas, limones y mandarinas.
La situación ha generado gran preocupación entre los agricultores europeos, quienes ven en riesgo no solo la calidad de sus cultivos.
En el último año, según un informe de La Unió de Llauradors, se registraron más de 100 incidentes relacionados con esta enfermedad en las importaciones, lo que llevó a un aumento significativo en los rechazos de cargamentos en las aduanas europeas.
Durante los primeros tres meses de la actual campaña de exportación, la organización señaló que Sudáfrica acumuló 20 interceptaciones, incluyendo ocho casos en agosto, lo que refleja un grave problema fitosanitario en el país.
La mancha negra no solo afecta a los productos cítricos en el campo, sino que también puede propagarse durante el transporte y el almacenamiento, aumentando el riesgo de contaminación de los alimentos que llegan a los consumidores europeos. Según la organización, una vez que la enfermedad se establece en una región, es extremadamente difícil de erradicar, lo que podría tener consecuencias devastadoras para la industria citrícola en Europa.
Con la presión creciente sobre las autoridades europeas, la necesidad de un cierre inmediato de las importaciones de productos sudafricanos se vuelve cada vez más urgente para proteger la agricultura local y garantizar la seguridad alimentaria en el continente. Los citricultores europeos están alarmados por la falta de acción de la UE, que, según ellos, parece priorizar intereses comerciales por encima de la salud fitosanitaria de los cultivos europeos.
La situación se complica con el contexto de las relaciones comerciales entre la UE y Sudáfrica, donde el país africano ha desafiado las restricciones impuestas por la Unión, argumentando que estas no están justificadas y afectan gravemente su economía, que depende en gran medida de la exportación de cítricos. La disputa ha llevado a Sudáfrica a solicitar consultas en la Organización Mundial del Comercio (OMC) para abordar las preocupaciones sobre las normas fitosanitarias de la Unión Europea.