Agroadvance, empresa pionera en la implementación de biotecnología de precisión en el avellano europeo en Chile
Han desarrollado e implementado diversas técnicas de biología molecular, destacando el monitoreo poblacional de bacterias y hongos a nivel de huertos mediante la técnica de reacción en cadena de la polimerasa cuantitativa (qPCR), el reconocimiento de patógenos y el análisis genómico de estos.
Xanthomonas arboricola pv. corylina (Xac) es una bacteria que causa la bacteriosis del avellano, una enfermedad que afecta principalmente a ramillas, hojas y frutos. Los síntomas incluyen cancros en ramas, manchas foliares y necrosis en pecíolos, lo cual afecta la fotosíntesis y la vitalidad general de la planta. A nivel de fruto, las infecciones pueden causar manchas oscuras y deformaciones, disminuyendo la calidad comercial del producto. La detección en campo comúnmente se realiza cuando la enfermedad ya está muy avanzada, lo que limita significativamente las opciones de manejo. En estos casos, la pérdida de vigor y productividad en los huertos es notable, afectando gravemente el rendimiento económico del cultivo. Por esta razón, la detección temprana y la cuantificación bacteriana son de relevancia crucial para diagnosticar con precisión e implementar estrategias de control efectivas antes de que el daño sea irreversible.
CUANTIFICACIÓN DE XANTHOMONAS ARBORICOLA PV. CORYLINA MEDIANTE QPCR
En los últimos años, han surgido nuevas estrategias de análisis basadas en el ADN de los microorganismos para su detección y cuantificación mediante biología molecular. La empresa Agroadvance, a través de su metodología Agroscreening, se fundamenta en el uso de herramientas moleculares y genómicas diseñadas para su aplicación en el campo. Agroadvance ha desarrollado e implementado diversas técnicas de biología molecular, destacando el monitoreo poblacional de bacterias y hongos a nivel de huertos mediante la técnica de reacción en cadena de la polimerasa cuantitativa (qPCR), el reconocimiento de patógenos y el análisis genómico de estos. En este contexto, se ha estado realizando el seguimiento de la bacteria Xac en distintos campos chilenos desde el año 2020. Para implementar esta técnica, se secuenciaron diferentes genomas de Xac mediante secuenciación masiva. Posteriormente, estos genomas se compararon y se eligió una región específica y única del genoma del patógeno para la implementación de la técnica. Con ello, se logró desarrollar un método específico y robusto para el seguimiento de Xac mediante qPCR.
DEL CAMPO AL LABORATORIO
Gracias a la implementación de estas técnicas moleculares, se ha logrado realizar el seguimiento de Xac a través de los diferentes estados fenológicos del avellano. Esto nos ha permitido entender la dinámica poblacional del patógeno causante de la enfermedad e implementar planes fitosanitarios y culturales para su control. Para llevar a cabo los análisis, todo comienza en los huertos productivos, donde las muestras son recolectadas cuidadosamente. Estas pueden provenir de diferentes partes del avellano: yemas, amentos, flores, madera, hojas o frutos. Una vez recogidas, las muestras emprenden un viaje hacia el laboratorio, en donde cada muestra es meticulosamente procesada para extraer su material genético total. Una vez obtenido el ADN de la muestra se realiza la cuantificación de Xac mediante partidores específicos que permiten reconocer este patógeno de manera precisa, entregándonos el número de bacterias Xac por gramo de muestra. Con esta información, los agricultores y fitopatólogos pueden tomar decisiones informadas sobre cómo proteger mejor sus cultivos de avellano, manteniéndolos sanos y productivos.