Cereceros ven una nueva oportunidad más allá del Año Nuevo Chino
Casi 50.000 kilos de la variedad Final, exclusiva de Giddings-Cerasus, arribaron el pasado 22 de marzo a China, apostando a una época donde hay poca oferta de cerezas en ese mercado. Gracias a una fruta de calidad, se llegaron a pagar US$146 por una caja de 5 kg.
De izquierda a derecha: Matamala, gerente general de Giddings Fuit China y Asia Pacífico; Mia Lu, gerente de abstecimiento internacional de Higo Jiaxing y Leo Wei, gerente general de Higo Jiaxing.
Por Rodrigo Pizarro Yáñez
Casi a fines de marzo, contra todo pronóstico, y cierres de campaña, la temporada de la cereza chilena en China aún no concluía. El arribo al mercado de Jiaxing del que está catalogado como el último contendor del 2022/23, marcó el punto y final de una temporada, catalogada por toda la industria, como ‘exitosa’.
La empresa Giddings-Cerasus, conocida en China como Xiaomifeng, abrió el último contenedor de cerezas de la temporada el pasado 22 de marzo en el mercado chino de Jiaxing, siguiendo su estrategia de prolongar la temporada más allá del Año Nuevo Chino. Y lo ha hecho con una fruta única que proviene de su propio programa de mejoramiento genético.
Final es el nombre de esta variedad exclusiva que llegó en pleno marzo, mes donde hay poca oferta de cerezas en ese país. “Este año los resultados fueron sorprendentes, porque hay escasez de cerezas en esta época, aun cuando existe fruta local de muy buena calidad , pero con muy bajo volumen y con una poscosecha débil. Nosotros empacamos a mediados de febrero y llegamos a mediados de marzo con una fruta que ha logrado precios espectaculares”, comenta Gonzalo Matamala, gerente general de Giddings en China y Asia Pacífico.
LA OFERTA SE AGOTÓ EN POCOS MINUTOS
Y es que tal como tradicionalmente ocurre al inicio de cada temporada, este último contenedor de cerezas generó la misma expectación entre los recibidores de fruta, que agotaron las existencias a pocos minutos de la apertura. El interés que generó esta variedad hizo que los precios de esta llegaran hasta 950 CNY (US$139) por cada caja en el mercado mayorista y más de 1.000 CNY (US$146) entre los minoristas que promocionaron las frutas.
Este contenedor fue comercializado por la oficina de Giddings en China y la empresa local Higo Jiaxing, en una actividad llamada ‘Let’s Celebrate’, que representa el cierre de la temporada de la cereza chilena 2022/23 en China, y que además pone la ‘guinda’ a un muy buen año para la fruta nacional.
Final es una variedad exclusiva de Giddings-Cerasus, que se viene cultivando hace varios años en Osorno. Y ya la temporada pasada, justo antes del ‘lockdown’ en Shanghái, la empresa realizó una actividad promocional con medios de prensa, clientes y ‘retailers’, “El año pasado la enviamos vía aérea. Este año ya iniciamos envíos marítimos de casi 50.000 kilos y tuvimos una recepción muy positiva, al igual que el año pasado, tanto a nivel mayorista como del ‘retail’ y tiendas especializadas”, sostiene Matamala.
HAY NEGOCIO MÁS ALLÁ DEL AÑO NUEVO CHINO
Reonocidas como una fruta ‘pemium’ en China, sobre todo para acompañar las celebraciones del Año Nuevo Chino, las cerezas chilenas enfrentarán diferentes retos en las próximas campañas. Uno de los más importantes es la distribución de la creciente oferta más allá de esta festividad y otras celebraciones que ocurren a final de año.
Siguiendo esa estrategia en el gigante asiático, y teniendo el objetivo de ofrecer un producto de calidad constante, Giddings-Cerasus ha ampliado su oferta varietal, especialmente aquellas que se cultivan en el sur del país, y que forman parte de la oferta tardía de la campaña. Se trata de una fruta producida en los huertos que la compañía maneja en Osorno, caracterizada por una buena firmeza y dulzura, que pueden cosecharse hasta 10 días después de Regina, la variedad reina de la Región de Los Lagos. No solo eso, porque además posee una larga vida de poscosecha y se proyecta con fuerza en los canales de venta ‘on line’.
“Cerasus nos ha deleitado este año con nuevas variedades durante toda la campaña. A principios de la temporada, ofrecen al mercado chino Meda Rex, que el mercado llama la Early Kordia por su rico sabor y firmeza. Curiosamente, la fruta se comercializaba a precios más altos que Santina. En la última parte de la temporada, en marzo, la empresa nos divierte de nuevo con esta fantástica variedad llamada Final”, explica Mia Lu, jefa de compras internacionales de Higo Jiaxing.
“Lo bueno de esta variedad es que es un producto nuevo. Lo que queremos hacer es abordar la temporada después del Año nuevo Chino con un producto diferente, que se comporta diferente a sus competidoras”, sostiene Matamala, sobe uno de los objetivos de la empresa, que es extender la ventana comercial de la cereza chilena en China.
La estrategia de Giddings-Cerasus desde sus primeros pasos en China ha sido posicionarse como un proveedor sostenible y fiable de cerezas de calidad. Su etiqueta Xiaomifeng es reconocida en el país y también ha ido ganando una fuerte posición entre las cerezas de EE UUs. En la actualidad, la empresa suministra cerezas diez meses al año: de octubre a marzo con fruta chilena y desde junio a septiembre con cerezas producidas en EE UU, y aspira a convertirse en proveedor de cerezas durante todo el año en el futuro.